El Haro puntúa en Mutilnova pero sigue sin ganar

Ayoze Paz / ADG
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Los jarreros arañan un 0-0 a la Mutilvera en un encuentro condicionado por el estado del terreno de juego

El Haro puntúa en Mutilnova pero sigue sin ganar

Ficha técnica:

 

Mutilvera: Valencia; Aldave, Ibáñez, Mahúgo, Sebas (Ilincheta, 76); Cisneros, Ayensa (Yoldi, 76); Barace, Briñol, Eder (Dani Ederra, 89); y Javi López (Satrustegui, 82).

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Haro: Fermín; Kevin, Gaizka Martínez, Echaide, Vesiaho, Javi Duro; Jon Iru (Borja García, 89), Josua (Manjón, 64); Joseba (Morgado, 76), Mikel Bueno (Butzke, 76) y Eizmendi (Iván Garrido, 64).

 

Árbitro: García Arriola (Comité vasco). Amonestó con tarjeta amarilla a los jugadores visitantes Kevin y Josua y al entrenador Aitor Calle.

 

Incidencias: Mutilnova. Partido a puerta cerrada.

 

El Haro no remontó su delicada situación en Mutilva, pero consiguió un trabajado punto y dejó su portería a cero por primera vez en lo que va de temporada (0-0). El equipo de Aitor Calle concedió poco al rival, aunque tampoco fue capaz de generar oportunidades claras. Mikel Bueno, que volvió tras superar su lesión, marcó un gol que resultó anulado por fuera de juego en el tramo final. El conjunto jarrero sigue instalado en la parte baja de la tabla y todavía no conoce el triunfo. Tres empates y cuatro derrotas oscurecen su casillero. La Mutilvera se queda con once. 

 

Las condiciones climáticas, horribles tras una intensa nevada a primera hora de la tarde, convirtieron el césped en una piscina. La primera ocasión de peligro llegó en el minuto ocho. A raíz de un despiste defensivo, Briñol disparó con la puntera en busca de la escuadra derecha, pero su disparo salió por encima del larguero. Le costó al conjunto harense adaptarse al campo. Tuvo que optar por el juego aéreo y utilizar las bandas para que la bola llegase al área opuesta. El lateral Kevin fue el protagonista ofensivo en los primeros ataques, doblando hasta llegar a la línea de fondo en varias ocasiones. Las oportunidades claras, sin embargo, no llegaban. 

 

En el 23, Josua se atrevió con un tiro lejano, pero sin peligro. Al minuto siguiente, Joseba forzó un centro desde el lateral izquierdo al segundo palo, donde Eizmendi remató de cabeza ajustado al palo, pero Valencia pudo atajar.

 

Corría el reloj y los de Aitor Calle empezaron a habituarse al terreno de juego, dándole la vuelta al escenario y empezando a crear peligro. Una falta botada por Vesiaho en el minuto 36 pudo haber hecho daño si hubiera encontrado un rematador. Otra aproximación destacada corrió a cargo de Joseba en el minuto 40, al culminar un pase de Mikel Bueno de cabeza. Sin embargo, Mahúgo se lanzó al suelo y desvió el lanzamiento cuando todo indicaba que acabaría dentro de la red.

 

La segunda parte siguió un guion parecido. En el minuto 49 Briñol esprintó hasta la frontal y pasó a Barace, que se encontraba en el lateral derecho. El extremo centró un balón a Eder, cuyo cabezazo se marchó alto.

 

Mikel Bueno siguió demostrando haber vuelto a los terrenos de juego a un buen ritmo competitivo. La mayoría de acciones ofensivas del Haro pasaban por sus botas. En el minuto 52 probó a rematar desde la frontal del área con la cabeza, aunque con poco peligro debido a la distancia a la que se encontraba de la portería.

 

El Haro estaba desplegando su mejor versión. El Mutilvera solo había logrado acceder al área rival en situaciones aisladas, aunque con peligro. En el minuto 65, el recién entrado Iván Garrido se quedó solo, se la picó al guardameta y la pelota entró en la portería, pero el asistente levantó el banderín e indicó posición antirreglamentaria. No sería el único tanto anulado. Mikel Bueno también anotó en el minuto 75, aunque en un fuera de juego bastante evidente.

 

Poco después el local Yoldi, desde fuera del área y con buena intención, cargó su pierna, aunque el remate se marchó por el lateral izquierdo. No ocurrió nada en los tres minutos de tiempo añadido.

 

El Haro dejó la meta a cero y logró un punto que, para su técnico, puede ser el comienzo de la reacción. Faltan goles y una pizca de suerte.