La vida no sigue igual para elCiudad de Logroño. El conjunto logroñés, pese al mal arranque de temporada, ha sabido revertir la situación y colocarse, como de costumbre, en zonas nobles de la tabla. Ante elFrigoríficos Morrazo, los de Miguel Velasco buscan la cuarta victoria consecutiva.
La temporada riojana no comenzó como estaba previsto. Diferentes lesiones y resultados inesperados alteraron, y mucho, a una plantilla corta y con mucha juventud en sus filas. A esto, hay que sumar la eliminación europea, previsible pero siempre ingrata, ante el Lemgo Alemán.
La liga Asobal comenzó mal. Primera derrota del curso doméstico y, además, en el Palacio de los Deportes. Malas sensaciones y peor juego ante un Sinfín acertado y efectivo de cara a portería. El 27-31 hizo daño pero el equipo reaccionó en León.
Como marca la tradición, el Ciudad de Logroño sacó los dos puntos ante u nAdemar que no sabe como plantar cara al conjunto de Miguel Velasco. La victoria (34-38) parecía un punto de inflexión pero nada más lejos de la realidad.
Una semana después, y aún con la euforia del triunfo en feudo leonés, la plantilla logroñesa no supo sacar adelante su duelo ante el Granollers (24-35). Nuevo derrota como local y, además, de forma contundente.
Las alarmas, pese a ser comienzo de curso, saltarían una semana después. El Cuenca, rival a tener en cuenta esta temporada, se llevaría los puntos ante su afición frente a un equipo con mucha fragilidad defensiva. El 33-26 hizo mucho daño pero supuso un punto de inflexión.
TRES VICTORIAS. Desde la visita a tierras conquenses, el Ciudad de Logroño no ha dejado de progresar en la clasificación. Tres victorias consecutivas han relanzado a un equipo que llegó a transitar por zonas peligrosas y que ahora, varias semanas después, lo hace por zonas que dan acceso a competición europea.
Para ver la primera victoria como local hubo que esperar a la jornada 5. El Huesca fue el equipo que pagó el buen hacer riojano. Triunfo ajustado (31-29) y primera gran piedra en el camino.
La segunda consecutiva llegó en la siguiente jornada y a domicilio. Triunfo muy sufrido en Córdoba ante un gran Puente Genil que, al igual que pasa con el Ademar León, acabo sucumbiendo a la tradición de victoria riojana en el Pabellón Municipal Alcalde Miguel Salas (30-31).
La tercera consecutiva, y la más abultada, llegó en la pasada fecha y ante un rival inesperado. El Bidasoa, que acostumbra a plantar cara, acabó cayendo en el Palacio por un claro 39-33.
Ahora, y una vez revertida la situación inicial, el Ciudad de Logroño quiere la cuarta. Será en Cangas de Morrazo y ante el Frigoríficos Morrazo, colista de la competición. Los gallegos solo han conseguido sumar de dos en la primera fecha, situación que espera alargar el conjunto de Miguel Velasco (sábado, 21 horas).