Un año para olvidar

El Día
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El EDF Logroño comienza a pensar en la Liga Reto y pide a sus jugadoras despedir la categoría con dignidad

El Eibar brilló como equipo; el EDF Logroño, no. - Foto: Óscar Solorzano

El EDF Logroño se reunió el viernes con algunas jugadoras y ayer lo volvió a hacer. El club sigue siendo de Primera división femenina pero a partir de julio competirá en Reto y toca prepararse para el descenso de categorías. Pese a la mala temporada, el club asume que una «decena o una docena» de jugadores serían interesantes para el año que viene pero será difícil que los deseos de la entidad y el de las futbolistas converjan.

Ha sido una temporada muy complicada en un EDF Logroño que el domingo no fue capaz de dar la talla ante un Eibar que jugó con diez durante 80 minutos. Fue la crónica de un descenso anunciado, de un vestuario dividido que no se lo ha puesto nada fácil a Javier Moncayo.

«Ha hecho todo lo que ha podido para reconducir la situación», reconoce IvánAntoñanzas, presidente del EDF Logroño que exculpa al turiasonense de lo sucedido   ante el Eibar y en partidos precedentes. «No se lo han permitido las jugadoras», lamenta el máxima responsable de un club que tiene que lidiar con la pérdida de categoría en pleno proceso de transformación en sociedad anónima deportiva.

«Ha habido desunión. Lo tengo claro. Desde el primer día ha habido muchos grupos en el vestuario y eso se ha notado», lamenta el presidente Iván Antoñanzas que desde hace semanas se  había mentalizado para este desenlace. «La convivencia ha sido muy difícil», criticó.

La destitución de Gerardo, el técnico que llevó al equipo a la final de la Copa del Rey pero que no pudo cogerle el pulso a la plantilla (la mejor de las tres que ha tenido el club en Primera), acabó por subrayar las diferencias de un bloque dividido que no ha sido capaz de anteponer los intereses del colectivo a los suyos propios.

El EDF tiene por delante dos partidos para despedir la temporada (Atlético y Rayo). El objetivo es dar la cara y despedirse de la elite como lo que son: un equipo, pese a que en él haya entrado la manzada de la discordia.