El Gobierno de La Rioja ha querido asegurarse de que no vuelve a suceder lo ocurrido en las convocatorias de los tres planes de ayudas anteriores, de reactivación, rescate y emergencia, -en alguno de ellos, la ayuda ha sido para el primero que la pedía-, y ha garantizado que todas las empresas y autónomos que cumplan los requisitos podrán beneficiarse del nuevo paquete de ayudas puesto en marcha para apoyarles a responder a los efectos de la pandemia, que contempla pagos de entre 3.000 y 200.000 euros.
Fueron los consejeros de Hacienda, Celso González; y Desarrollo Autonómico, José Ángel Lacalzada, los que detallaron las bases para acceder al nuevo plan, que asciende a 32,5 millones aportados por el Gobierno de España, y a los que pueden acceder autónomos, pymes y empresas riojanas de todos los sectores que garanticen una pérdida de facturación del 30% respecto a 2019.
«Nadie se quedará sin las ayudas, independientemente de cuándo las solicite», aseguró el consejero de Hacienda, que informó de que las peticiones deberán presentarse, únicamente de manera telemática, en la ADER, que se encargará de su gestión.
El consejero de Hacienda recordó que estas nuevas ayudas emanan del Real Decreto-ley de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial, que dejaba fuera a algunos sectores de gran relevancia en la economía regional, como vino, calzado o mueble , que, finalmente, se han incluido gracias al papel «clave» y las gestiones realizadas por la presidenta, Concha Andreu, ante el Gobierno de España. Igualmente fundamental ha sido la participación de los miembros del Diálogo Social, gracias a cuya intervención las ayudas se han extendido a todas los sectores económicos.
A grandes rasgos, tendrán carácter finalista y deberán aplicarse a satisfacer la deuda y pagos a proveedores y otros acreedores, financieros y no financieros, así como los costes fijos incurridos, siempre y cuando estos se hayan devengado entre el 1 de marzo de 2020 y el 31 de mayo de 2021. También serán subvencionables los préstamos pendientes de amortizar, con preferencia, a la hora de concederlas, de los avalados por el Estado a través del Instituto de Crédito Oficial para operaciones formalizadas entre el 1 de marzo de 2020 y el 12 de marzo de 2021.
Lacalzada realizó una compleja y prolija enumeración de las bases que, salvo pequeños detalles, se ajustan a las incluidas en el Real Decreto. Así, podrán solicitarlas las empresas, pymes o autónomos con domicilio fiscal en La Rioja, cuyo volumen de operaciones anual declarado o comprobado por la Administración, en el Impuesto sobre el Valor Añadido o tributo indirecto equivalente en 2020 haya caído más de un 30% con respecto a 2019.
Antes de conceder las subvenciones, la Agencia Tributaria cotejará toda la documentación declarada en la solicitud para comprobar su veracidad fiscal, destacó el consejero de Hacienda, quien insistió en que los trámites de pago serán «rápidos».
Agentes Sociales. El propio consejero de Hacienda, Celso González, reconoció el buen entendimiento entre el Gobierno y los miembros del Consejo de Diálogo Social, UGT, CCOO y FER, «para tejer una red que ha permitido sostener a numerosas familias y apoyar al tejido empresarial y económico en los momentos más complejos»;y ellos, satisfechos en líneas generales con el nuevo paquete de ayudas, se arrogan el mérito de haber sido los artífices de la inclusión de todos los sectores.
Así, el presidente de la Federación de Empresas, Jaime García Calzada, señaló que, aunque no comparten algunos de los requisitos contemplados en esta ayuda por parte del Gobierno de la nación «como así ha transmitido CEOE», valoran de manera «muy positiva» la inclusión en La Rioja de todos los sectores de actividad en este plan de ayudas, tras el acuerdo de la mesa de Dialogo Social.
«Asimismo consideramos fundamental que estas ayudas lleguen a sus destinatarios con la mayor rapidez posible así como que el procedimiento de solicitud sea sencillo», apela el presidente de la patronal.
El secretario general de UGT, Jesús Izquierdo, también valora de forma muy positiva la puesta en marcha de estas ayudas para aquellas empresas que están atravesando dificultades y que tienen pagos pendientes.
«Por parte de UGT hemos exigido que estas ayudas llegaran a todos los sectores afectados y a todas las empresas con problemas, al igual que se hizo en el Plan de Rescate», destacan igualmente desde el sindicato mayoritario en la región.
Considera «tremendamente positivo» que en una situación de dificultad, de falta de tesorería por parte de las empresas y, sobre todo, de problemas para abonar las deudas pendientes, se hayan puesto a su disposición estos recursos que van a facilitar, no solo el mantenimiento de las empresas, sino especialmente el mantenimiento del empleo, que es lo que más preocupa a los sindicatos.
«Esperamos que estas ayudas sean suficientes y lleguen a todas las empresas en dificultad y, por eso, propusimos en el marco del Diálogo Social que se ampliaran no solo a los sectores más afectados por la pandemia como son las actividades turísticas, hosteleras y de restauración, o al sectores estratégicos de la región como el calzado, el mueble y el vino, sino también a otros sectores que también están pasando por grandes dificultades», destaca Izquierdo, que reflexiona que se trata de poner recursos a disposición de aquellas empresas que lo necesitan y que se comprometan a mantener la actividad, que es uno de los requisitos que viene recogido en el Real Decreto.
Del mismo modo, el secretario general de Comisiones Obreras, Jorge Ruano, destaca que «tras un debate interesante» con el Gobierno y la patronal», se consideró que era para La Rioja más adecuado «abrir las ayudas» a todos los sectores. «Si el objetivo es garantizar la solvencia y el mantenimiento de las empresas, habida cuenta de que todos los sectores han sufrido, en mayor o menor medida, los efectos de la pandemia, era más positivo que todos los afectados recibieran dinero», argumenta Ruano, que añade que se trata de poner dinero en circulación, garantizar pagos y «mejorar la situación de aquellos que tienen futuro».