Los datos definitivos sobre movimientos naturales de población correspondientes a 2020 certifican la sangría que ha provocado el virus SARS-CoV-2, el del covid, que fue la causa de la muerte de 74.839 españoles en 2020, de los que 577 eran riojanos.
El impacto del coronavirus en la población no solo se nota en el número de defunciones, sino que afecta al resto de indicadores, pues las restricciones de movilidad y el impacto económico y psicológico de una epidemia que no se acaba de superar provocaron caídas en casi todas las variables demográficas, como nacimientos y matrimonios. La afección de la pandemia, de hecho, ha provocado una caída de la esperanza de vida de 15 meses en La Rioja, al pasar de los 83,8 años de 2019 -80,9 para los hombres y 86,4 para las mujeres- a los 82,5 del pasado ejercicio. Esta circunstancia obedece al número de fallecimientos que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), fue de 3.700, lo que supone una subida del 17,6% respecto a 2019, cuando se contabilizaron 3.147. El número de natalicios descendió un 3,47% y vinieron al mundo 2.318 bebés frente a los 2.408 del año anterior, que había registrado una ligera subida, del 3,3%, respecto a 2018. Las madres de origen extranjeros dieron a luz a 6.734 niños, que suponen el 29% de todos los s nacidos en La Rioja, con un leve descenso de cuatro décimas. En España, el 22,6% de los nacimientos correspondieron a madres foráneas.
Con estas cifras, La Rioja registró, al igual que nuestro país, un saldo vegetativo negativo, que fue de 1.382 personas, al haber más defunciones que nacimientos. No obstante, y según las cifras del INE, La Rioja cerró 2020 con 266 habitantes más, un 0,08%, al pasar de 315.93 del año 2019 a los 1316.197 del anterior ejercicio, gracias a la llegada a esta comunidad de 1.660 personas, de las que la mayoría, 1.333, provenían del exterior. Un total de 327 son fruto de la migración interior. España, donde también creció levemente el número de habitantes, -en 63.077, hasta los 47.394.223 -también se benefició de los movimientos migratorios y el saldo con el exterior fue positivo en 216.244 personas durante el año 2020, invirtiendo la tendencia creciente iniciada en 2013. Un total de 465.721 personas procedentes del extranjero establecieron su residencia en nuestro país (un 37,9% menos que en 2019): mientras que 249.477 personas abandonaron España con destino a algún país extranjero (un 15,8% menos que en el año anterior).
Menos bodas. El mayor descenso, en cambio, lo sufrieron las bodas, condicionadas por la limitación de movimientos y el derecho de reunión, y experimentaron una caída del 44%, al contabilizarse 623 el año pasado frente al 1.117 del precedente; en nuestro país, el descenso fue aún mayor, del 45,6%. La edad media del primer matrimonio en esta comunidad se situó en 35 años, más elevada que en 2019, cuando era de 34,3 años; en España era de 34,9 frente a los 36 de 2020.
Las mujeres residentes en La Rioja tienen su primer hijo con una media de edad de 31,4 años -frente a los 31.2 de nuestro país-, edad que experimentó una ligera subida respecto al año anterior, de 31,2 y 31,1, respectivamente. La Tasa Bruta de Natalidad, que mide los nacimientos por cada 1.000 habitantes, es de 7,33, la octava del país -en España es de 7,19-;y la Tasa Bruta de Mortalidad es de 11,7, la séptima de España donde alcanza el 10,4. El Indicador Coyuntural de Fecundidad, que refleja el número de hijos que tendrá una mujer a lo largo de su vida fértil, es de 1,29, ligeramente superior a la media, donde es del 1,19.