Un diplomático para una Roja de entreguerras

El Día
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El jarrero Luis de la Fuente será presentado este mediodía como máximo responsable de la selección española

Luis de la Fuente, en los Juegos Olímpicos de Tokio. - Foto: RFEF

La era de Luis de la Fuente (Haro, 1961) al frente de la selección española comienza este mediodía. El técnico jarrero toma el mando de La Roja y lo hace con la Euro de 2024 como meta. Por delante, mucho trabajo para restañar heridas y, sobre todo, para recuperar el crédito perdido que el buen europeo realizado hace apenas 18 meses ha dejado en entredicho en Catar. Luis Enrique es historia pero la involución experimentada en la última década es palmaria (solo tres partidos ganados en las últimas tres ediciones mundialistas) pese a que el técnico asturiano consiguió llevar a La Roja, y no es baladí, a las semifinales del último torneo continental y a dos fases finales de la novísima LigaEuropa, competición esta última en la que debutará el riojano. 

La mano izquierda que le ha faltado a LuisEnrique en su didáctica y en el trato con los medios, le sobra al jarrero, técnico que se declara «confiado» e «ilusionado», y al que no se le conoce una frase desabrida, un mal gesto ni una provocación. En Haro, sus paisanos le reconocen que tiene «talento» y «talante», atributos que serán necesarios para gestionar a una España de entreguerras.

Pese a todos los éxitos que han acompañado a las categorías inferiores, de los que él ha sido copartícipe pues lleva nueve años trabajando en Las Rozas (en su haber figura una Eurocopa con la sub'19, otra más con la sub'21, una plata olímpica y un oro en los Juegos del Mediterráneo), la selección, desde el 11 de julio de 2010, fecha del triunfo en Johannesburgo, no ha pasado de los octavos de final, jalón que Brasil 2014 ni tan siquiera alcanzó. La eliminación en penaltis ante el Marruecos este 6 de diciembre precipitó la salida de Luis Enrique que en su lista dio cabido a prácticamente la totalidad de jugadores que, en un momento u otro, pasaron por las manos del nuevo seleccionador. Solo Gavi, por su precocidad, y Busquet, por su dilatada trayectoria, son 'desconocidos' para el técnico harense.

Aunque muchos aficionados se preguntan por su currículo, en Haro no esconden que formó parte del último Athletic campeón que, a las órdenes de Javi Clemente (otro seleccionador vulcánico), conquistó dos ligas, una copa y otra supercopa. Su gran pesar fue, tras pasar por todas las categorías, no llegar a la Absoluta, paso del que, en cierto modo, se desquitó el 8 de junio de 2021.

Si este currículo no es suficiente, Luis Salazar, ex presidente del Haro, recuerda que su conocimiento del fútbol es enciclopédico «pues ha entrenado en todas las categorías y, aunque nadie se acuerde, fue también delegado del Athletic, con Caparrós».

Jesús Otero, su sucesor al frente del Haro Deportivo, reconoce que su llegada al frente de La Roja es«natural, un paso consecuente en la política de la federación» y un movimiento táctico, apaciguador y, sobre todo, consensuado.

Si del lateral incisivo, profundo y potente, un carrilero de toda la vida, una figura que ya no se prodiga en el fútbol moderno, no queda mucho recuerdo, el presente y futuro del Luis de la Fuente entrenador está por escribir. Hoy arranca la reconstrucción de La Roja, con un seleccionador de la capital del Rioja al mando.

La era De la Fuente arranca en marzo. Habrá que esperar al 25 de marzo para que De la Fuente debute al frente de la Absoluta. El partido con Noruega, correspondiente a la fase clasificatoria de la Eurocopa de 2024, será en realidad el segundo encuentro del jarrero al frente de La Roja. El 8 de junio de 2021 dirigió a la Absoluta en encuentro amistoso ante Lituania(4-0). Aunque todos los jugadores (entre ellos Guillamón y Yeremy Pino) eran sub'21, cuenta a todos los efectos para la Absoluta.

Un estadio con su nombre. El Mazo cambiará próximamente su nombre para dar cabida al seleccionador nacional, cuya vinculación con el Haro Deportivo está fuera de toda duda. El cambio de nomenclatura ya ha sido aprobado y solo falta que se proceda a su sustitución.