El cielo nocturno estrellado de San Román de Cameros puso en la noche del viernes el broche de oro a la edición más concurrida del ciclo "Noches estrelladas en la Reserva de la Biosfera", al que han asistido más de un millar de personas en 8 espacios de la Reserva de la Biosfera, dentro de un programa organizado por la Consejería de Sostenibilidad y Transición Ecológica.
El programa ha recorrido este año los Valles de Leza, Jubera, Cidacos y Alhama de la mano de la Asociación de Astronomía de La Rioja, en unas sesiones precedidas de actividades complementarias previas, gestionadas por organizaciones locales y que también han contado con el favor del público, ha informado este sábado el Gobierno de La Rioja, en una nota.
Han consistido en visitas guiadas al patrimonio, entre el que había varios castillos, la observación de mariposas nocturnas y actividades gastronómicas.
Ayer en San Román se realizó una visita guiada a los característicos suelos empedrados de la localidad.
El consejero de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía, Álex Dorado Nájera, y el director general de Calidad Ambiental y Recursos Hídricos, Rubén Esteban, asistieron al cierre de este ciclo de observación nocturna, que se ha convertido en un clásico de verano riojano.
Ocón, San Vicente de Robres, Clavijo, Lagunilla de Jubera, Herce, Cornago, Muro de Aguas y San Román de Cameros han sido las localidades que han acogido este año las ocho jornadas de visualización de estrellas en la Reserva de la Biosfera de La Rioja.
Según ha afirmado el consejero, "las sesiones de Noches estrelladas son una forma de crear conocimiento sobre algo tan lejano como las estrellas y cuerpos celestes, a través de la astronomía, a la vez que promovemos el conocimiento sobre algo tan cercano como nuestra, nuestros pueblos y sus valores naturales, culturales y etnográficos, en una parte de La Rioja, que se enfrenta al reto demográfico y para la que la
Reserva de la Biosfera supone una oportunidad de desarrollo sostenible".
El territorio Reserva de la Biosfera de La Rioja fue declarado Destino Starlight por la calidad de sus cielos nocturnos.
Fue el primer destino en España en ser reconocido y certificado como destino Starlight en un área protegida (julio 2012), lo que permite asociar la ciencia y el turismo y convertir la astronomía y la visión del firmamento una nueva forma de turismo inteligente que aporta criterios innovadores para el desarrollo responsable de la actividad.
Este reconocimiento se obtuvo porque este territorio cumple el doble objetivo: conservar un cielo con calidad suficiente para poder contemplar las estrellas y tener un patrimonio material e inmaterial vinculado de una u otra forma con la astronomía, desde el que la observación del cielo nocturno puede ser muy atractiva.
La Certificación Starlight persigue garantizar la capacidad de disfrutar de la visión de las estrellas y de conocer los valores científicos, culturales, naturales
y paisajísticos asociados.