El 6 de febrero de 2022, la carrera futbolística de Jorge Martínez Losa (Arnedo, 1999) se interrumpía en Tudela. El sábado, el espigado delantero debutaba con la UDL en liga y lo hacía marcando el tanto del definitivo 1-1. El primer gol como blanquirrojo ya ha llegado pero tiene veinte jornadas más para dejar su sello en un equipo que necesita sus goles. 

Jorge, once meses después, ¿vuelve a sentirse futbolista?

Sí, así es. El golpe que recibí el 6 de febrero fue muy duro. Me intervinieron rápido, sabía que iba a ser muy difícil llegar a la pretemporada porque tenía un gran destrozo y el objetivo era estar listo para invierno. El (UD) Logroñés se interesó por mí y se dio el paso. Estoy muy agradecido al club que más gente mueve de LaRioja por su confianza. Quiero que la gente esté muy orgullosa. 

La Real, su club hasta el 30 de junio, se ha comportado muy bien.

Es cierto que me lesioné siendo jugador suyo pero, una vez acabado el contrato, me han puesto todas las facilidades. Solo puedo estar agradecido hacia la Real Sociedad.

Ha caído de pie. Primer partido liguero, primer gol.

Bueno, los compañeros me lo han puesto fácil, la verdad. Tuve la suerte de estrenarme prácticamente en el primer balón que toqué. Es una pena que el gol no sirviera para conseguir los tres puntos.

¿Cómo ha sido su adaptación a su nuevo equipo?

Muy bien, la verdad. El equipo me ha acogido bien y encima es una ciudad que ya conocía. Estoy cerca de casa, hay muy buen grupo, con compañeros que ya conocía como Titi o Zourdine, con los que coincidí en el Calahorra y Real, y otros como Kortazar contra el que he jugado muchos años. También coincidí con Pepe, del filial, o con el propio Ander Dulce, que sigue en el club.

Ha pasado por dos graves lesiones y, pese a ello, siempre ha sido optimista.

Fueron lesiones diferentes. La primera vez, todo era nuevo. Tuve la suerte de recuperarme rápido. Esta segunda, ha sido más dura, con más tiempo de recuperación. Todos los que jugamos estamos expuestos a estas situaciones. Las lesiones son gajes del oficio. Está claro que si tiene que pasar, estas cosas pasan. En esta lesión, mentalmente es lo que más he trabajado. Me he aislado y me he centrado en la recuperación.

La acción de su lesión en el Ciudad de Tudela, ¿le viene muchas veces a la cabeza?

Sí, la he visto muchas veces   y no cambiaría nada de lo que hice. No me martirizo. Sé que pensé «otra vez a mí» pero, a partir de eso, me dije a mí mismo «voy a recuperarme».

Debuta con la Real y, en la primera jugada, se echa la mano al tobillo.El estadio enmudeció...

Fue un lance del juego. En un saque de banda, piso sin querer a un compañero y se me dobla el tobillo. Fue algo fortuito. Se me hinchó el tobillo pero gracias a los fisios se logró reconducir la situación y pude jugar el sábado.

Tuvo 45 minutos contra el Barça Atlètic. ¿Está ya para jugar de inicio?

Estoy para lo que decida el míster. Es cierto que el ritmo de competición no es el mismo que el de los entrenamientos, pero a las sesiones que he completado con el equipo hay que sumar los dos meses de trabajo en Zubieta. Estoy para ayudar. Si me dicen 60 minutos, juego 60. Si son 45, 45. Si tienen que ser noventa, saldré a tope y daré lo máximo.Lo mismo si son quince minutos.

¿Cómo fueron sus sensaciones el sábado?

Buenas, la verdad, y más cuando marcas la primera que te llega. Piensas que estás de vuelta pero lo cierto es que luego no encontré situaciones de remate. El gol me da confianza.

¿Cómo ve la situación desde dentro? El triunfo se le resiste a la UDLdesde hace mucho tiempo.

Lo veo mentalizado. Quedan 20 partidos que vamos a competir como si fuera una liga propia. Si así lo interiorizamos, nos va a ayudar. No tengo la sensación de derrotismo. No es la sensación que hay en el vestuario pese a que somos conscientes de que la situación  no es buena. Aunque hay muchas ganar de remontar el vuelo.

El año pasado jugó en el Grupo 1. Ahora lo hace en el 2. ¿Ve muchas diferencias?

La primera vuelta la he seguido desde la distancia, pero veo que está todo muy apretado. Tres victorias te proyectan al 'play off' y tres derrotas te hunden. Sumar de tres se nota mucho y llevamos mucho tiempo sin hacerlo. 

Pase lo que pase en Castellón, el equipo referente de La Rioja por abonados y presupuesto va a acabar la primera vuelta en descenso.

Sé que suena fuerte. Pero creo que el año pasado el Athletic B acabó la primera vuelta en descenso y luego despegaron. Tenemos que cambiar cosas. No nos van a regalar el estar arriba. Somos conscientes de que la situación es mala pero todavía queda un mundo.

El objetivo es el ascenso. No sé si es tiempo de replantearse las metas.

Como club, el objetivo de la Unión Deportiva Logroñés es estar en el fútbol profesional. Como jugador, tengo claro que hay que ir partido a partido. Sabemos que puede pasar de todo.

El Calahorra, su antiguo club, es colista mientras que la Sociedad Deportiva Logroñés es décima.¿Cómo ve a las otras dos entidades con los que su equipocomparte el grupo?

Al Calahorra lo veo con sentimiento de haber estado dos años ahí y saber que no se vive un buen momento. Miro a Soto, Carlos Vicente, Jesús, Tarsi, etc. y sé que lo están haciendo muy bien y pienso: «No éramos tan mal equipo». Había buen grupo. En cuanto a la Sociedad Deportiva Logroñés, no me sorprende. Conozco a muchos de sus jugadores. Raúl Llona tiene las ideas muy claras y sabe transmitirlas a sus jugadores. Tienen una idea en la cabeza y la plasman a la perfección.

Ha vuelto a sentirse futbolista. ¿Qué le pide a este primer semestre de 2023?

Victorias, qué le voy a pedir. También, si le tengo que pedir algo al año, salud sobre todo. Estar bien y disfrutar del fútbol, del juego. Si todo esto acampaña, estoy seguro de que las victorias van a llegar. El fútbol se trata de que la pelotita entre...