Desde el Domingo de Ramos al Domingo de Resurrección, las 11 cofradías de Logroño volverán esta primavera a recorrer las calles en 16 procesiones, en las que, con sus 20 pasos, rememorarán la pasión, muerte y resurrección del Señor.

Tras dos años de ausencia, en los que los 3.500 cofrades de la ciudad han celebrado la Semana Santa, además de en sus iglesias, a través de las redes sociales, Facebook y Youtube, este año se recuperan todos los actos y procesiones, tanto de la Cuaresma como de Semana Santa, para que recobre el «esplendor» que merece un acontecimiento declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2015.

«Se celebrará la Cuaresma y la Semana Santa con normalidad con actos y procesiones», afirma el hermano mayor de la Hermandad de Cofradías de la Pasión de la Ciudad de Logroño, Francisco José Marín, que avanza, no obstante, que se seguirán manteniendo las medidas sociosanitarias que establezcan las autoridades. Tal es el caso de los actos de Cuaresma, que se desarrollan en interiores, y en los que habrá que portar mascarillas, respetando la distancia de seguridad que se establezca en cada momento. Será, precisamente, la Cuaresma, que se inicia en Miércoles de Ceniza, este año el dos de marzo, el primer hito que recupera la Hermandad. Al día siguiente se celebra el primer acto, con la presentación del cartel de Semana Santa y el homenaje a los miembros que cumplen 50 años en sus cofradías, una celebración que será más numerosa al festejar también a los de 2021.

A falta de cerrar algunos de los nuevos actos, el hermano mayor de la Hermandad confirma que tendrán lugar los viacrucis de los viernes de Cuaresma, la exposición, que este año se instalará en la plazas de Abastos, el Certamen de bandas y se cerrará este periodo de 40 días con el pregón que se celebra el 7 de abril. «Al día siguiente, viernes de Dolor, con la procesión que sale de la iglesia de Santiago,  comienza la Semana Santa», que asistirá a la organización de todas las procesiones previstas para concluir el Domingo de Resurrección, con la que parte del cementerio.

Ilusión recobrada. Marín reconoce la «desilusión» que ha supuesto para los cofrades no salir a la calle durante estos dos años, habida cuenta de que «el culmen» de las cofradías es procesionar las imágenes, «sacar la Pasión de Cristo a la calle durante esos días».

«No lo habíamos visto nunca, no había otra alternativa, así que, en medio de una gran tristeza, los cofrades nos resignamos», relata el hermano mayor que, como positiva, extrae la enseñanza de que se ha aprendido a utilizar los medios digitales, «a emplear otras maneras de hacer llegar la Semana Santa».

Con «muchas ganas, como cuando uno se recupera de un periodo de decaimiento, con una voluntad impresionante para dar el do de pecho», todos los cofrades, «incluso aquellos que durante estos dos años se han mantenido alejados», vuelven a recuperar la ilusión, de tal manera que no faltarán portadores para las imágenes.

La Hermandad de Cofradías de Logroño se creó en 2000 como sucesora de la Hermandad de la Pasión y del Santo Entierro, que había nacido en 1940, justo después de la Guerra Civil. Se centró en  revitalizar por completo la gran Procesión del Santo Entierro, y a su vez organizar una nueva procesión, la del Encuentro, que se realiza en Jueves Santo.