Logroño ha logrado una calificación "aceptable" en el Índice de Libertad Económica de las Ciudades Españolas (ILECE), en el que ocupa el puesto 40 de un total 50 ciudades, con una nota de 51,27 puntos, casi al borde del suspenso.

Este estudio revela que, respecto a la puntuación de 2022, Logroño ha bajado 0,03 puntos y ha perdido cinco puestos, al bajar del 35 al 40, informe Efe.

"Una plantilla excesiva y costosa, una escasa externalización de los servicios y una presión fiscal bastante considerable son los factores que más lastran la nota de Logroño", detalla el ILECE.

Este informe puntualiza que, "aunque aprueba en los grandes datos de desempeño económico general del municipio, tiene también espacio de mejora reduciendo el coste per cápita del Ayuntamiento. La ciudad está a poco más de un punto de suspender, como ya le sucedió en 2020".

 Las tres grandes ciudades españolas, Madrid, Barcelona y Valencia, suspenden con una calificación de "insuficiente" el examen sobre libertad económica que realiza anualmente la Fundación para el Avance de la Libertad, que sitúa en cabeza a Santa Cruz de Tenerife, Alicante y Almería con una nota "satisfactoria".

En concreto, de las 50 ciudades analizadas, Madrid está en el puesto 44, Valencia en el 43, Barcelona en el 42, las tres con "insuficiente"; Sevilla en el 38 con "aceptable" y Zaragoza en el 28 y Málaga en el 23 con "moderada".

El ILECE procesa 800 variables, correspondientes a 16 indicadores básicos, en cada una de los cincuenta municipios con más población de todo el país, arrojando cuatro parciales para las áreas de desempeño económico, magnitud de la plantilla, intervencionismo económico y presión fiscal municipales.

Entre sus conclusiones, el estudio señala que "el color político influye poco en el grado de libertad económica", aunque constata en algunos indicadores, como la tendencia a remunicipalizar servicios o la incontinencia del gasto, la contratación o las subvenciones, "un mayor intervencionismo por parte de las formaciones políticas de izquierda".

También confirma que en 2023 se mantiene la tendencia de mejora de años anteriores, que se reduce el diferencial entre las ciudades mejor y peor puntuadas, que el tamaño de las ciudades presenta una "correlación negativa" con su grado de libertad económica y que, en cambio, no hay conexión entre el grado de libertad económica municipal y el nivel económico o el grado de competitividad fiscal de su comunidad.

El secretario general de esta fundación de carácter liberal y coautor del estudio, Juan Pina, considera que "las políticas públicas municipales tienen un efecto cada día mayor sobre la libertad económica general de empresas y particulares, atrayendo o expulsando tanto profesionales individuales como actividad económica".