La elección de Diego Ochoa (Logroño, 1989), coordinador de la cadena de librerías Santos Ochoa, cuarta generación de la empresa, no podía ser otra: El Embaucador, en la calle San Agustín 41 con terraza en Bretón de los Herreros. «Una ubicación perfecta en la entrada a la Laurel, que es a primera parada del lugar donde comienzan todas las historias interesantes y donde nace un poco la noche, porque otra cosa no, pero la Laurel da para muchas historias». 

Y, para historias, las que le unen al establecimiento. «Una de las principales razones de que me guste mucho El Embaucador es que es de mi hermano pequeño, Pablo, que acaba de ser padre de un bebé que se llama Santos para colmo, Santos Ochoa», apunta el ilusionado tío.

«Otra de las razones es el pincho que voy a probar», la albóndiga de la yaya Vero sobre una cama de patatas bravas cruijientes. «Esta albóndiga es como las que lleva haciendo toda la vida mi abuela, la yaya Vero como la llamamos nosotros en casa, con su receta, por lo que emocionalmente me conecta», asegura. La degusta con una copa de Caudum, un vino singular de Rioja,  «que hacen unos amigos», aunque, según el momento, también opta por una botella de sidra «que permite escanciar o hacer el paripé con los amigos haciendo más divertido el momento de los pinchos».

EL EMBAUCADOR. Albóndiga de la yaya Vero sobre cama de patatas bravas crujientes y copa de vino tinto singular Caudum (DOCa Rioja). - Foto: Óscar Solorzano

Se confiesa un habitual, «como en todos los grupos de amigos, tenemos nuestras preferencias, nuestra docena de bares a los que vamos regularmente y sobre los que vamos pivotando los findes y entre semana, que permite disfrutar la zona y los pinchos de un modo distinto», sin tanto bullicio. «Me gusta un montón salir, aprovechar, ir de pinchos, Laurel, San Juan, San Agustín y, por supuesto, el Paseo de las Cien Tiendas que tiene una oferta enorme, porque en Logroño tenemos la suerte de que se puede ir andando a todos los sitios y según sales de trabajar escribir a tus amigos y quedar y hacer planes sobre la marcha porque no hace falta reservar», destaca.

Como presidente de la asociación de comerciantes del Paseo de las Cien Tiendas también reivindica su zona «piensa que tenemos una suerte tremenda con una zona emblemática de las tortillas y la mejor tapa, desde el Porto Vecchio que lleva toda la vida especializado, el Tizona con la mejor tortilla de España y su 'bacañuelo' que está logrando muchísimos éxitos, y es una zona con una oferta hostelera enorme donde disfrutar de muchos buenos momentos en las terrazas».