Todas las mujeres riojanas de entre 25 y 65 años serán invitadas a realzarse un cribado para la detección precoz de cáncer de cérvix o cuello de útero en los próximos meses. Salud ha reorientado el programa de detección precoz y va a realizar un nuevo cribado que se va a extender de forma progresiva a toda la población diana de La Rioja, las mujeres de entre 25 y 65 años. Será el primer cribado poblacional que se hará en centros de salud de La Rioja desarrollado por matronas y abarcará a unas 90.000 riojanas. 

 La directora de Enfermería de Atención Primaria del Servicio Riojano de Salud, Noemí Marauri, explica que la misma semana pasada comenzó el pilotaje en los centros de salud de Cascajos, La Guindalera y Alberite y en los próximos meses se irá avisando a todas las riojanas de toda La Rioja.

En esta ocasión, y de forma inédita, las matronas de Atención Primaria, (en La Rioja hay 17), van a ser las referentes de esta nueva programación y serán ellas las que hagan el cribado. Colaboran con profesionales de Atención Hospitalaria de los servicios de Ginecología y de Anatomía Patológica, pero son la matronas las que lideran el nuevo Programa de Detección Precoz de Cáncer de Cérvix en La Rioja. 

Se trata de un programa y una campaña que está financiada por la Unión Europea- NextGenerationEU, con fondos ligados al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Marauri explica que con este programa se sigue la recomendación del Ministerio de Sanidad que incorpora la prueba de detección del virus del papiloma humano (VPH) como prueba primaria de cribado en una parte de la población diana en el Sistema Nacional de Salud.  Además «se sigue también la recomendación de la OMS ya que publicó en 2020 una estrategia global cuyo objeto es la eliminación del cáncer de cérvix como un problema de salud pública». 

«De momento hemos empezado el programa con el tramo de 25 a 35 años en estos tres centros», pero antes de finalizar el año se va a hacer en todos. 

Hasta ahora se hacía un cribado de este cáncer a las mujeres que acudían a su revisión ginecológica al especialista, pero ahora es extensivo a toda la población y en su mismo centro de salud. «Es una forma mucho más rápida y directa», propone Marauri.

con un sms. Las mujeres reciben un SMS al móvil en el que se les facilita información para conseguir cita con la consulta de la matrona de su centro de salud. Y la prueba es muy sencilla, la matrona recoge la muestra del cuello de útero y la envía al laboratorio para su estudio. «La mujer recibe un SMS cuando el resultado de la prueba es normal y una llamada de la matrona si se detectan células anómalas o presencia del VPH». «Y a partir de ahí serán derivadas al Servicio de Ginecología para completar el estudio de forma inmediata».

A finales de 2018, en La Rioja se modificó la prueba en cribado sustituyendo la citología tradicional por otra en medio líquido, con menos falsos negativos. En 2019 se inició un cribado que se realizaría en el servicio ginecológico, pero con la pandemia se paralizó.

En La Rioja se diagnostican unos 15 casos de cáncer de útero al año. El cáncer cervical uterino es el segundo tipo de cáncer más común en las mujeres,  «y es uno de los cánceres más evitables con la detección precoz», explica Marauri, «porque la detección de la infección por papiloma humano se diagnostica con una citología, se trata, y en un 85% de los casos las lesiones son transitorias, y solo en un 15% persiste la infección que es lo que puede desembocar en un cáncer. Pero hay cirugía y tratamientos quirúrgicos que lo puede evitar». La prevalencia de infección de este virus, por transmisión sexual, es de un 14% en mujeres de entre 25 y 65 años, por lo que en La Rioja se pueden infectar al año unas 12.600 mujeres de VPH.

Por otra parte, está la vacunación para evitar el virus, y el porcentaje de vacunación de las niñas entre los 11 y 25 años de La Rioja supera el 91%.