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El Día
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El Ciudad de Logroño progresa tras sumar cuatro triunfos consecutivos

Los riojanos reciben instrucciones el pasado sábado en Cangas do Morrazo. - Foto: Raúl Fonseca

El Ciudad de Logroño ha sabido reconducir un mal inicio de competición que le llevó a la antepenúltima posición. Eso sucedió el pasado 24 de septiembre. Desde entonces, los de Miguel Velasco han mejorado sus prestaciones hasta el punto de que ocupan la cuarta plaza, con diez unidades, las mismas que suma el Bidasoa. Por debajo quedan equipos como Benidorm o Ademar León que, en el primer mes de competición, aventajaban a los de Miguel Velasco.

La entidad logroñesa, que este sábado (Palacio de los Deportes, 17.30 horas)buscará su quinta victoria consecutiva ante el Torrelavega, duodécimo clasificado con seis puntos, ha dejado atrás una crisis que sin llegar a ser preocupante sí que puso en sobreaviso a los aficionados riojanos.

Lo ha hecho, además, con bajas de peso. A las ausencias consabidas de Leo Dutra y Eduardo Cadarso, que no reaparecerán hasta la segunda vuelta el próximo mes de febrero, hay que sumar las ausencias de Ángel Rivero y Ángel García así como el concurso intermitente de Kisselev.

La recuperación de la óptima línea de juego y resultados ha llegado gracias a una muy buena actitud defensiva. En las cuatro primeras jornadas, el equipo logroñés encajó un total de 133 goles, es decir, poco más de 33 por partido. En los últimos 250 minutos de juego, esta sangría se ha reducido, encajando 114 tantos (19 menos), lo que deja la media en 28,5 por cada sesenta minutos de juego. En O Gatañal, la portería riojana tan solo encajó 22 encuentros, cifra difícilmente mejorable.

En lo ofensivo, el equipo también ha mejorado sus prestaciones. Ante Sinfín, Huesca, Granollers y Cuenca, los riojanos anotaron un total de 115 goles, es decir, 29 por partido.

La cifra, siendo óptima, ha sido mejorada en las últimas cuatro jornadas. Frente a Huesca, Puente Genil, Bidasoa y Frigoríficos del Morrazo, partidos todos ellos que se han saldado con triunfo, los riojanos anotaron 128 tantos, es decir, 32 goles por encuentro.

El récord de anotación se consiguió ante el Bidasoa, cita resuelta favorablemente para los riojanos por 39-33. La peor tarde, en defensa, llegó en la tercera fecha liguera con los logroñeses cayendo en el Palacio por 24-35 ante el Granollers, segundo clasificado en la actualidad con dos puntos más que los de Velasco. 

Si en las cuatro primeras jornadas los cuatro rivales a los que se enfrentó el Ciudad de Logroño anotaron más de treinta goles, en el último mes sólo lo han logrado Bidasoa y Puente Genil, que perdió por un ajustado 30-31.