Logroño recupera la escuela taller para emplear a 20 jóvenes

Carmen Sánchez
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El proyecto educativo vuelve a la agenda municipal tras una década parado y estará listo el próximo verano. Tendrá una especialidad en construcción y otra en medio ambiente

La formación se impartirá en el pabellón de empleo municipal, situado en el polígono Cantabria. - Foto: Ingrid

El Ayuntamiento de Logroño retoma el programa de escuela taller después de una década de parón. Este proyecto se encuentra ahora en una fase embrionaria y en pleno desarrollo para que pueda ponerse en marcha el próximo verano, según apunta el concejal de Servicios Sociales, Iván Reinares. El objetivo no es otro que favorecer la empleabilidad de los jóvenes en situación de vulnerabilidad y que tienen grandes dificultades para conseguir un puesto de trabajo, contribuyendo así a dar nuevas oportunidades posibilitando la formación mixta teórico-práctica. 

Está previsto que una veintena de jóvenes puedan formar parte de este proyecto para el que se han contratado a cuatro personas. Se trata de una arquitecta, una pedagoga, una ingeniera agrónoma y una educadora social. Estas profesionales comenzaron en octubre a dar forma a la futura escuela taller que formará a los jóvenes en dos especialidades: mantenimiento de instalaciones y construcción y de medio ambiente.

El desarrollo de este proyecto está coordinado desde la Unidad de Servicios Sociales aunque, debido a su carácter transversal, también están implicadas el resto de áreas municipales, recuerda Reinares. 

La escuela taller es un modelo de formación mixta que permite compatibilizar el aprendizaje teórico y práctico y contar con un contrato laboral. Así, el proyecto municipal contempla la creación de una especialidad sobre construcción e instalaciones y otra relacionada con el medio ambiente. Ambas modalidades se impartirán en el pabellón de empleo municipal, aunque se utilizarán otros recursos municipales como el Parque de Servicios o el Vivero municipal para desarrollar las prácticas. Una vez finalizada esta primera fase, los participantes serán contratados por el Ayuntamiento durante un periodo de seis meses para que puedan realizar labores de mantenimiento y adecuación  en inmuebles municipales (pisos, edificios, etc.), en zonas verdes de la ciudad o acometer pequeñas actuaciones recogidas en los presupuestos participativos de Logroño. 

«La escuela taller es la herramienta idónea» para los jóvenes, defiende el concejal de Servicios Sociales. Es más, el edil considera que este modelo puede ser una solución al «hartazgo de hacer cursos que notienen repercusión en su empleabilidad ni una aplicación práctica». En todo caso, insiste en que hay que facilitar a la juventud instrumentos que les permitan «sentirse útiles» para poder activar la búsqueda de empleo. 

Reinares aboga también por ofrecer un modelo de empleabilidad a los jóvenes en situación de vulnerabilidad que huya de los patrones estandarizados, ya que entiende que estos «no funcionan para todo el mundo».

El plan del Ayuntamiento de Logroño es que este proyecto reciba financiación del Gobierno de La Rioja, por lo que se presentará a la próxima convocatoria de ayudas, antes de que se ponga en marcha. 

Lo que se pretende, al fin y al cabo, es que la labor que realicen los jóvenes participantes no solo repercuta en el bien de la ciudad, sino de que los chavales se sientan realizados y vean la utilidad de su trabajo.