Logroño permitirá el acceso de mascotas a las bodas civiles

El Día
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La nueva ordenanza de animales establece el sacrificio cero e incrementa las multas, con hasta 3.000 euros para las infracciones muy graves

Un joven pasea a sus dos perros en un parque de Logroño. - Foto: Ingrid

La nueva ordenanza reguladora de la tenencia responsable y protección de animales de Logroño, que se prevé aprobar definitivamente en febrero de 2023, establece el sacrificio cero, gestiona las colonias felinas, obliga a usar agua para limpiar la orina de los animales e incrementa las multas, que pasan de 150 hasta 750 euros en el caso de infracciones leves, de un máximo de 450 a 1.500 euros para las graves y de los 901 euros actuales para el máximo en las infracciones muy graves hasta 3.000

También permite el acceso de los animales de compañía a los edificios públicos municipales y a la celebración de matrimonios civiles, aunque, en este último caso, deberá comunicarse previamente, informa Efe.

La concejala de Bienestar Animal, Amaia Castro, ha presentado este jueves, en una rueda informativa, la nueva ordenanza, que cuenta con un total de 41 artículos, frente a los 25 de la anterior.

Ha subrayado que el objetivo de esta ordenanza es avanzar en el bienestar animal y en mejorar la convivencia en Logroño, ya que "es un texto mucho más desarrollado y con un carácter más explicativo que el de anterior ordenanza".

Además, incorpora un artículo especifico de definiciones de conceptos novedosos, como casa de acogida, colonia felina, maltrato animal y tenencia responsable.

Esta ordenanza, ha explicado, incorpora aspectos relacionados con el control sanitario de los animales, como el establecimiento del sacrificio cero en Logroño, protocolos de intervención en casos de animales causantes de lesiones y el uso preferente de sistemas disuasorios de ahuyentación en casos como el control de población de aves, entre otros.

Otra de las novedades es el establecimiento de un título completo a la protección y control de Animales, en el que se incluyen artículos sobre el fomento de la adopción, la gestión de colonias felinas y asociaciones de protección y defensa de los animales.

Prohibiciones.

Asimismo, ha indicado que se prohíbe el abandono, el maltrato, la agresión física a los animales o someterlos a prácticas que "les puedan provocar sufrimientos, daños o angustia".

También se prohíbe mantener atados a los animales de forma permanente o en espacios no acondicionados y practicar mutilaciones de cualquier tipo, ya que "antes se permitían las estéticas, además de peleas, circos con animales, vandalismo a colonias felinas y el uso de collares de pinchos o eléctricos", ha recordado.

Otras prohibiciones son la circulación por calles, plazas y parques públicos de animales no acompañados y conducidos; la entrada o permanencia de animales en zonas públicas destinadas a juegos infantiles, calistenia, áreas biosaludables para personas mayores y pistas multideportivas.

Tampoco se autoriza que los animales beban directamente de los grifos y fuentes de uso público para personas y que orinen o defequen en fachadas de edificios y locales, así como en elementos del mobiliario urbano.

En este sentido, ha señalado que la persona que conduzca al animal está obligada a eliminar las heces mediante el depósito de bolsas impermeables en papeleras y, respecto a los orines, será obligatorio usar agua para eliminarlos en superficies sólidas y diluirla en zonas verdes o alcorques.

Otra de las novedades, ha apuntado Castro, es que establece que los animales de compañía podrán acceder a los edificios públicos municipales que presten servicios de naturaleza únicamente administrativa.

Ha precisado que los perros deberán estar sujetos con una correa corta o permanecer dentro de sus transportines y siempre bajo la vigilancia de la persona portadora; y los gatos deberán permanecer vigilados en sus transportines.

La nueva ordenanza incrementa el grado de especificación de las infracciones leves, que podrán alcanzar hasta los 750 euros; las graves, hasta los 1.500; y las muy graves, hasta los 3.000.

Cuenta con un apartado dedicado a la inspección y vigilancia para asegurar el cumplimiento de la ordenanza, que realizarán miembros de la Policía Local y los veterinarios municipales.