La Caridad Grande, mermada por el intenso sol y la Covid-19

Rebeca Palacios (Efe)
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El 500 aniversario de esta fiesta en la ermita de Lomos de Orios, de Villoslada de Cameros, se ha visto afectado por las circunstancias, como la tradicional romería que la caracterizaba y con tan solo una asistencia de 300 personas

Imagen de una misa en La Redonda. - Foto: Ingrid

Unas 300 personas han asistido este domingo a la misa organizada junto a la ermita de Lomos de Orios para sustituir la celebración de la romería de la Caridad Grande, cuyo 500 aniversario ha quedado deslucido por las restricciones impuestas por la COVID-19 y un intenso sol, que han desanimado a muchos vecinos de Villoslada en Cameros a asistir a esta tradición centenaria.

El alcalde de Villoslada en Cameros, Julio Elías, ha detallado a Efe que al acto solo se podía asistir con invitación, por lo que mucha gente mayor no se ha animado a subir hasta la ermita ante la posibilidad de no poder participar en la eucaristía, celebrada al aire libre y con megafonía.

Elías ha explicado que se había previsto la asistencia de unas 400 personas a la celebración de la misa, en vez de la romería que solía congregar a unos 4.000 fieles.

Para ello, en la explanada junto a la ermita de Lomos de Orios, se han colocado sillas separadas metro y medio, en una zona acordonada al aire libre.

Durante la misa se ha bendecido de forma simbólica un trozo de carne de cordero para cumplir la tradición de "caridad" y, en vez de repartir cientos de raciones entre los asistentes, este año se donará carne para 350 raciones a la organización Cocina Económica, que tiene un comedor social en el Casco Antiguo de Logroño.

Los asistentes a la misa han recibido un bollo de pan bendecido, previamente envasado para preservar las medidas higiénicas, pero no han podido entrar a la ermita ni tocar la imagen de la virgen, ha puntualizado el alcalde de Villoslada.

Esta tradición se remonta al año 1520, cuando un grupo de pastores villosladenses que regresaban de la trashumancia por tierras extremeñas, al verse asaltados, se encomendaron a la virgen riojana de Lomos de Orios, según escribió Juan Fernández Salvador en 1722.

La historia cuenta que una densa niebla les ayudó a esconderse, por lo que tras el milagro, los pastores prometieron a la virgen ofrecer cada año una "caridad" de carne de cordera y pan, lo que dio origen a la romería más multitudinaria de La Rioja.

Para conmemorar estos cinco siglos de tradición ininterrumpida, que se celebra el primer domingo del mes de julio, el pueblo de Villoslada de Cameros y la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño habían organizado numerosas actividades culturales y religiosas entre los meses de abril y julio.

Elías ha subrayado que el pueblo "mantiene la ilusión por celebrar el 500 aniversario" de esta tradición, por lo que la Caridad Grande se conmemorará en 2021 o "cuando se pueda", porque este rito no "va a decaer".