El Audi 80 acaba de cumplir medio siglo. Superventas entre 1972 y 1995, el coche siguió la evolución dentro de la marca del F103 y se le considera el padre del A4, que tomaría su testigo para continuar con la tradición de un sello que ya se había convertido en una de las referencias en el mercado del automóvil a nivel mundial.
El Audi 80 estaba disponible con carrocerías sedán y familiar, las más demandadas en sus tiempos de crecimiento en el mercado, aunque también tuvo versiones deportivas. En sus primeros seis años de vida, se vendieron más de un millón de unidades.
Su éxito no solo se mide por su longevidad. También recibió numerosos premios, entre ellos el de Coche del Año en Europa en 1973 y 1987. Además, sus diseños gustaron tanto que otras marcas pidieron permiso a Audi para utilizar algunas piezas en sus prototipos.
El medio siglo del Audi 80El Audi 80 comenzó su producción europea en mayo de 1972, llegando el año siguiente a Estados Unidos y Australia bajo el nombre de Audi Fox. Era un sedán de dos y cuatro puertas y su aparición sirvió para mantener una dura rivalidad con sus principales competidores en el mercado. Equipado con motores de gasolina de 1,3 y 1,5 litros, su combustión interna contaba con distintas potencias.
En 1976 se modificó su parte frontal para hacerla similar a la del Audi 100 C2, cambiando los faros redondos por los cuadrados. También se mejoró el motor (1,5 a 1,6 litros) y el modelo deportivo evolucionó. Esta plataforma, denominada B1, fue dada de baja en 1978.
Un diseño de Giorgetto Giuggaro sirvió para dar el pistoletazo de salida en Europa a la segunda generación en septiembre de 1978. Seis años después se le hizo un lavado de cara, principalmente con mejoras en el motor (cinco cilindros, turbo diesel) y modificaciones en las luces de cola, parachoques traseros y faros delanteros.
El medio siglo del Audi 80Este modelo destacó por su versatilidad y rentabilidad, ya que muchos de sus componentes sirvieron también para el Audi Quattro, el Audi Sport Quattro y la Coupé Audi. Se mantuvo en el mercado europeo hasta finales del año 1986.
La tercera generación del Audi 80 vio la luz en otoño de 1986. Las principales novedades fueron la carrocería totalmente galvanizada, que aseguraba una década de garantía anticorrosión, y una notable mejora aerodinámica, que permitía alcanzar los 180 km/h de velocidad punta en su versión de 90 CV.
También presentó importantes mejoras en cuanto a la seguridad, con un nuevo sistema que era capaz de proteger tanto al conductor como al copiloto, retirando el volante y tensando el cinturón, gracias a un sistema de poleas y cables. Los últimos modelos del Audi 80 también incorporaron el airbag.
Las principales novedades en el último cambio de generación del Audi 80 fueron la mayor distancia entre los ejes, ruedas de 15 pulgadas con pasos más prominentes, una variación en el diseño de los parachoques, una mayor calidad en los materiales y la fusión de la calandra delantera y el capó, ganando en sensación de audacidad.
El Audi 80 dio paso al A4 en el año 1996, cesando su producción en un momento de transición desde modelos más antiguos a otros basados en nuevas plataformas para el segmento de las berlinas. Medio siglo después, sigue siendo uno de los referentes en la historia de la marca de los cuatro aros.