De insidias y políticos de fuste

Feli Agustín
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La segunda jornada del Debate de la Ciudad asiste a un agrio debate entre el portavoz de Cs y del alcalde, que alaba el tono «serio y de fuste» de Escobar al que recuerda, pasquín electoral en mano, que lleva 31 años en política

El alcalde, junto a los concejales de Ciudadanoa. - Foto: Ingrid

A tenor de las manifestaciones realizadas por los portavoces de los grupos políticos tras la intervención el lunes de Pablo Hermoso de Mendoza en la primera sesión del Debate del Estado de la Ciudad, la jornada de ayer parecía que iba a estar entretenida. Ylo cierto es que, salvo en ciertos pasajes algo más soporíferos, no decepcionó, hubo acusaciones y defensas, réplicas y contrarréplicas, miradas al pasado y vaticinios de futuro.

Con los comicios municipales, como quien dice a la vuelta de la esquina, el último debate de la legislatura tuvo un aire de precampaña que hace intuir los derroteros por los que discurrirán los próximos meses, de aquí al 28 de mayo, fecha elegida para la cita con las urnas. 

Fue Rubén Antoñanzas, portavoz del Partido Riojano y concejal de Deportes, quien abrió con brío la jornada, constatando el enfado que había confesado la víspera, en particular por la no apertura del CCR, un centro del que fue artífice otro concejal regionalista -Ángel Varea- bajo el mandato de otro alcalde socialista, Tomás Santos. «Ha faltado a su promesa, creo que podría haber hecho más», le espetó a Hermoso, que en su primera réplica trató, con gestos -le palmeó la espalda al dirigirse al estrado- y palabras, aplacar a Antoñanzas.

«Ha realizado muy buena gestión, agradezco su apoyo para buena parte de la transformación de esta ciudad», respondió el alcalde, que fue menos empático cuando el portavoz regionalista le acusó de «no querer molestar a quien manda en sus partido», una servidumbre que no padece al militar en un partido «cuyo único interés es La Rioja».

«Entiendo que le es difícil cambiar el sombrero de presidente del PR a concejal del equipo de Gobierno», respondió el alcalde a Antoñanzas que, haciendo gala de su alardeado compromiso con la calle, cedió parte del tiempo de su segunda intervención de Carmen García, vecina de Madre de Dios, que se quejó del estado de abandono del barrio. «Me gustan calles abiertas, pero solo favorecen al centro», dijo la vecina de una zona de cuya asociación Rubén Antoñanzas presidió.

La presencia de esta señora le vino al alcalde que ni pintada para anunciar que el próximo 2 de noviembre comienza la obra civil para consolidar las actuaciones de urbanismo táctico desarrolladas en y para anunciar a la concurrencia que Jaime Caballero, principal artífice del nuevo urbanismo local, vivió «muchos años» en Madre de Dios, de tal manera que su importancia para el equipo de Gobierno no hay que dudarla.

Pintar calles. Después de una intervención correcta, pero poco polémica de la portavoz de Unidas Podemos, Amaia Castro, llegó el nudo de un relato que alcanzó altas cotas de tensión. Fue el portavoz de Ciudadanos, Ignacio Tricio, el que pronunció un discurso muy agrio, que, como mínimo, incomodó al alcalde.

«Mientras los logroñeses pasan dificultades, usted se dedica a pintar las calles;todo en usted es pura propaganda», afirmó el edil de Cs, que insinuó que el interés de Hermoso de Mendoza en aprobar el edificio de Bosonit a cambio de un empleo.

«Esta es la oposición que tenemos, usted mismo se retrata», respondió Hermoso de Mendoza, que repasó el periplo de Ciudadanos en esta legislatura, que practica la «política del absurdo».  «Comenzó con un portavoz, Julián San Martín, que se marchó y después se fragmentó con la marcha de dos concejales; esa es su contribución», señaló el primer edil, que le acusó de lanzar «insidias».

«Habla de sectarismo y prepotencia porque no se aprueba lo que usted quiere, eso es democracia, ¿cómo entiende usted la política? parece que no entiende cuál es el proceso de la democracia», argumentó Hermoso, que le acusó de «rencor y mala actitud» por lo que confía en que muchos de los 10.000 votantes de Cs se conviertan en votantes del PSOE.

Después de este cruce de recriminaciones, el desenlace del Debate, que tuvo como protagonista a Conrado Escobar, transcurrió como una cita (o casi) en el paraíso.

El portavoz popular está a la espera de los designios de su nuevo líder, Gonzalo Capellán, para saber cuál será su futuro cercano, incertidumbre que no le arredró para realizar una intervención de alcaldable. «Vamos a suprimir los disparates y borrar pinturas inútiles», avanzó Escobar, que lanzó un paquete de medidas para sus hipotéticos votantes.

Acusó a Hermoso de contar con una «agenda oculta» y, a pesar de que fue rebatiendo la mayoría de las actuaciones del equipo de Gobierno, recibió una respuesta casi de colega del alcalde.«Agradezco su tono, de político de fondo, serio y de fuste», señaló el primer edil, que dijo a Escobar «que coincide en su propuesta de ciudad».

Pero como estamos en precampaña electoral, Hermoso desempolvó un pasquín electoral de 1991, donde ya figuraba Escobar -y también Ángel Sáinz Yangüela- para señalar, haciendo referencia a la tesis doctoral de Capellán, que «ahora usted es del liberalismo de Sagasta y, mañana, de lo que haga falta para seguir 30 años en política».