La venta de coches en España se ha mantenido respecto a 2020. El sector del automóvil sigue lastrado por el impacto de la crisis de los microchips y los semiconductores que ha impedido poder servir los turismos que se querían vender (e incluso que los clientes habían reservado) en 2021. Si bien, esto ha pasado en toda España, «y no explica por qué en el país ha crecido la venta un 1% y en La Rioja ha caído un 19%», lamenta Eduardo de Luis, presidente de la Asociación Riojana de Automoción de La Rioja (Ariauto) integrada en la FER. 

Es más, esta Comunidad ha liderado la caída de ventas del año 2021 con respecto al anterior en cuanto a matriculaciones de turismos y todoterrenos. Respecto a 2019, un año 'normal' en ventas, la caída ha sido del 40%. Los datos proporcionados por las asociaciones Anfac, Faconauto y Ganvam indican que en La Rioja en 2021 se vendieron 2.957 coches, en 2020 3.650 y en 2019, 4.838.

El escenario es difícil de analizar, según De Luis, que asegura que la caída de ventas es muy negativa. Como causas se refiere a varios factores, además de los microchips y la incertidumbre ante la venta y las inversiones causadas por la pandemia, en La Rioja en particular, «somos más conservadores y quizás tengamos más miedo a invertir. La gente tiene dudas sobre qué tipo de coche se tiene que comprar». 

Para el sector, la solución pasaría por «intentar buscar una alternativa de consumo extraordinaria». De Luis se refiere a ayudas autonómicas que se han puesto en marcha en comunidades como por ejemplo Galicia, o Extremadura, «en esta última daban ayudas aunque compraras coches de segunda mano». A nivel estatal hay una ayuda importante pero solo para vehículos eléctricos. 

La venta que más ha caído ha sido la del canal de particulares, un 24%, y el de empresa un 8,44%. «El mercado de particulares es del que se vive. Cuando desciende ese ratio es más preocupante, que es donde se aprecia la riqueza de la región. Y llevamos dos años con caídas». 

Como asociación «hemos pedido a la Administración de La Rioja una reunión para solicitar ayudas personalizadas para mover la economía del automóvil». 

Y otro de los palos en las ruedas para el mercado del automóvil nuevo es la cada vez mayor venta de coches de segunda mano. Una tendencia que además en La Rioja es mayor que en la media nacional. «Esto no genera economía en general, porque en el caso de La Rioja la mayor parte de estas compraventas se hace entre particulares».  Lo cierto es que en el último año la venta de vehículos de ocasión ha crecido un 6% respecto al año anterior. Y se han vendido 12.151 coches. Lo que en realidad supone el  78% de toda la cuota de mercado. Es decir, que la compraventa de vehículos usados es tres veces mayor que la de nuevas matriculaciones. Mientras que a nivel nacional la venta de ocasión dobla a la del vehículo nuevo. 

El problema de esto, insiste De Luis, es que el parque móvil de La Rioja cada vez es más viejo.  Porque, el 70% de los vehículos vendidos en 2021 tenían más de 10 años. «Y nos estamos arrastrando en un parque móvil viejo». La edad media de un turismo en La Rioja es de 14,28 años, 15,05 años tiene un vehículo en general (se tienen en cuenta autobuses, camiones, furgonetas y motos). La media nacional es de 13 años. 

En La Rioja, de los 153.508 que hay hoy matriculados, según los datos de la Dirección General de Tráfico, el 63% tiene más de 10 años, el 45,5% más de 15 años, y el 18% más de 20. 

Para el sector, la venta de más vehículos usados en La Rioja que en otras comunidades se puede deber a que la transacción es menos dificultosa entre 'conocidos', y que «para ir por los pueblos valen muchos coches». 

Más inseguridad.

La jefa de Tráfico de La Rioja, Beatriz Zúñiga insiste en que, hay más probabilidad de accidente en caso de que el vehículo sea más viejo, y es incluso más dura con este mensaje, «el riesgo de fallecer en caso de accidente en un coche de más de 15 años, frente a uno nuevo, es del doble».

En cualquier caso, las perspectivas de cara al año 2022 en el mercado es similar al comportamiento en 2021. «Los pesimistas dicen que vamos a vender 900.000 coches en un año, y los optimistas 990.000. La crisis de los chips o semiconductores continuará al menos durante el primer semestre. Para junio se podrá suministrar coches», desea el también gestor de concesionario.

 Porque hay algo que tienen claro, «este es un momento, el mejor de los últimos 20 años, en el que con estas bajadas tanto fabricantes como concesionarios estamos dispuestos a dar las mejores condiciones de financiación y precio».