Txell Alarcón fue anunciada ayer como nueva jugadora del Araski que, días antes, anunció a la argentina Burani. Son las últimas jugadoras del Promete que han encontrado acomodo en la Liga Femenina. Antes fue el turno de Serena Geldof y de Jojo Nogic, entre otras ex de la entidad riojana que no volverá a competir en la elite del baloncesto español.

El Promete renunciará a su presencia en la Liga Femenina y lo hará en una triple permuta que devolverá al Clarinos a la máxima categoría y que ascenderá a Challenge, segunda categoría nacional, al Melilla, club que cede sus derechos al Promete que arrancará en Liga Femenina 2 pero lo hará con un nuevo nombre.

Aunque el plazo de inscripción en las categorías nacionales se acaba el 30 de junio, la renuncia del Promete es oficial.Su desvinculación del baloncesto formativo se produce nueve años después de su constitución, momento en el que tomó el relevo de Las Gaunas.

Aunque el club desaparece, La Rioja seguirá teniendo un referente en la tercera categoría del básquet femenino. Su base será el equipo que ha competido este año en Primera Nacional.El nuevo club retomará el trabajo de cantera del Promete, club que hace apenas unas semanas ha destacado en los Nacionales de categorías inferiores (el cadete cayó en cuartos de final ante el Unicaja mientras que las júniors se han impuesto en la Euroyouth Basketball Cup).