La Primera RFEF sigue dando que hablar y no precisamente por su buena gestión. Muchos fueron los problemas de su primer año de vida y parece que, en su segundo cumpleaños, el proyecto de Rubiales y compañía vuelve a tambalearse.
A menos de un mes y medio para que de pistoletazo de salida la temporada 2022-23, la viabilidad de la competición sigue en entredicho. Por el momento, solo 31 equipos de los 40 que componen la Primera RFEF han dado el visto bueno a su participación la próxima temporada, lo que significa que aún restan nueve equipos que no saben que pasará con su futuro más cercano.

Pese a que los nombres no han trascendido, Sanse, Rayo Majadahonda, Bilbao Athletic, Osasuna Promesas, Real Sociedad B, Cornellà, DUX Internacional de Madrid, Amorebieta y un noveno en discordia podrían ser los afectados.

Son muchos los problemas en cuestión pasando por la economía hasta diferentes impedimentos como los accesos, la iluminación o tipo de césped. El Cornellà, uno de los afectados, parece haber puesto fin a estos problemas ya que, salvo giro, disputará sus encuentros de primera RFEF en el RCDEStadium, propiedad del RCDEspanyol. Clubes descendidos están en preaviso para un posible reemplazo.

SEIS DÍSCOLOS. Además, la RFEF está muy pendiente de la asociación formada por Real Unión, Majadahonda, Linares, Linense, San Sebastián de los Reyes y Dux. Precisamente, el conjunto de Villaviciosa ha realizado un escrito, dirigido a José Manuel Franco, presidente del Consejo Superior de Deportes, recriminando el apoyo de la entidad un cuestionado Luis Rubiales que, en las últimas semanas, ha sido denunciado por diferentes clubes y asociaciones.