Los municipios contienen gastos y Logroño sube la deuda global

Feli Agustín
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Los municipios riojanos deben 70,2 millones, 17,7 más que en 2020 debido al abono de los 30,3 millones de la última factura del soterramiento. El resto, la reducen en casi 3 millones

Obras en el nudo de Vara de Rey. - Foto: Óscar Solorzano

Los 8.131 ayuntamientos que hay en nuestro país cerraron 2021 con una deuda de 17.324 millones de  euros, ligeramente más elevada que en 2020, cuando alcanzó los de 17.679 millones, en una variación que supone el primer incremento en una década, tras el paulatino descenso que se había ido producido desde 2012, cuando el volumen adeudado era el doble y superaba los 35.000 millones.  Los importes en que pueden endeudarse las entidades locales están limitados por la Ley Orgánica  de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera de 2012, unos topes que se flexibilizaron para acompañar al notable esfuerzo que ha exigido a las administraciones afrontar la pandemia.

En el caso de La Rioja, la deuda global de los municipios también ha crecido, en este caso de manera más importante que en el conjunto nacional, una circunstancia que no ha obedecido, o no únicamente, a la obligación de intensificar esfuerzos para hacer frente a la pandemia, sino que hay que atribuírselo al Ayuntamiento de Logroño y la necesidad de liquidar el préstamo del soterramiento. Este requerimiento le supuso el año pasado al Consistorio un desembolso de 30,3 millones para abonar el denominado 'balloon' del préstamo, esto es, un pago único, más grande de lo normal, que se hace al final del plazo para zanjar el crédito;en total, para este fin, Logroño pagó el año pasado 34 millones.

Con ello, un total de 45 de los 174 ayuntamientos de LaRioja cerraron 2021 con una deuda de 70,181 millones frente a los 52,479 de 2020.

Según la información del Ministerio de Hacienda, este es el primer incremento desde 2011, cuando, la alargada sombra de la crisis financiera de 2008 elevó la deuda de los ayuntamientos riojanos a una cifra fuera de control de 127.000 millones de euros, 50.000 millones más que el pasado ejercicio.

Por lo que respecta a Logroño, cerró el año con una deuda de 54,7 millones, cuyo Ayuntamiento tenía pendiente 34,2 millones en 2020, una suma que creció respecto a 2019 en 3,5 millones, en este caso, debido a la inversión suplementaria provocada por la epidemia el coronavirus. 

Es, en cualquier caso, la suma más elevada que ha de abonar a los bancos  el Ayuntamiento de la  capital desde 2012, cuando se elevaba a 47,4 millones. No es desdeñable la contención en el gasto que ha realizado el Consistorio -siguiendo la línea de anteriores corporaciones- con un incremento de la deuda de unos 20,5 millones después de haber abonado 34 millones en 2021 y poner fin así a la deuda  generada por la mayor obra acometida en las últimas décadas.

Los 44 que deben. Así las cosas, cada uno de los 319.485 riojanos debe 221,5 euros, 57 más que los 164,5 de 2020, a pesar del gran desempeño que, en general, ha realizado los ayuntamientos para mantener la solvencia en sus cuentas. Así, al margen de Logroño, el resto de los municipios deben unos 15,5 millones frente los 18,3 de 2020, lo que refleja el trabajo de contención realizado al contabilizar un ahorro de 2,8 millones. Esta suma se reparte entre 44 localidades, de las que 20 deben más de 100.000 euros. Después de Logroño, el núcleo que más cuentas pendientes tiene con el banco es Calahorra, con 2,1 millones, tras reducir en un 25% una deuda que al cierre de 2020 superaba los 2,6 millones. Pradejón es el tercer pueblo de La Rioja más endeudado, con cerca de 1,9 millones, una cifra que ha experimentado un aumento de unos 250.000 euros respecto al ejercicio precedente. La siguen, con una cuantía similar, dos cabeceras:Nájera (1,39 millones frente a los 1,72 de 2020) y Cervera, que adeuda 1,33 millones y presenta, igualmente una mengua frente a los 1,463 de 2020.

Autol, con 1,16, y Aldeanueva, con 1,08, son los otros dos municipios riojanos que rebasan una deuda de un millón de euros, aunque en ambos casos se ha reducido la suma. Cenicero ha logrado bajar este año de esta cuantía y el monto que adeuda se ha quedado en 937.000 euros. Según el Ministerio de Hacienda, hay tres cabeceras, Alfaro, Arnedo y Santo Domingo cuyas cuentas están en negro, mientras que Haro mantiene una deuda de 2.000 euros.  Municipios como Entrena                               ( 596.000) y Cuzcurrita (520.000) presentan abultadas deudas y destacan las sumas que tiene pendientes pueblos escasamente poblados. Así, los 46 habitantes de Brieva deben 50.0000 euros;o los 78 de Canales, 70.000;los 84 de Soto, 115.000;y 71.000  los 81 de Viniegra de Arriba. 

Por cierto que Ochánduri, que ha ostentado durante años el dudoso honor de ser el municipio por habitante más endeudado del país, debe 'solo' 53.000 euros, 671 por vecino, menos de la mitad que el año anterior.

"La deuda de Logroño es sostenible".  Esmeralda Campos, concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Logroño, confirma que el aumento de la deuda que ha experimentado el Consistorio entre los dos últimos ejercicios, de 20,5 millones de euros, obedece al último pago, de 30,3 millones, de la letra de la obra de la integración del ferrocarril.  «Normalmente, mantenemos la deuda alrededor de los 30 millones, pero el año pasado se produjo un importante salto cuantitativo debido al 'balloon' [cuota] final del soterramiento», constata la responsable de las arcas públicas de Logroño, que destaca que, a pesar de este esfuerzo, que ascendió en total a 34 millones, «seguimos estando en un ratio inferior al 75% [de los ingresos corrientes, que es lo que está permitido», lo que nos  faculta para seguir realizando inversiones, que podríamos financiar con un préstamo». De hecho, este año ya se han pedido 14 millones para este fin y Campos insiste en «que nos encontramos en una situación de deuda normal y sostenible», a pesar del esfuerzo realizado pare el pago del 'balloon' final, el pago «más importante que ha efectuado el Ayuntamiento de Logroño en toda su historia».

Así las cosas, según el presupuesto municipal del Ayuntamiento de Logroño de 2022, la deuda viva de la capital asciende a 88,4 millones de euros, el 62,90% de los 140,5 millones que su Consistorio tiene previsto ingresar. En este capítulo, figura la deuda con las entidades financieras -la pendiente, la recientemente formalizada, que se ha suscrito pero de la que no se ha retirado el dinero o la proyectada- y, además,  412.232,17 que se adeudan a la comunidad autónoma. Esta cuenta pendiente corresponde  a pólizas firmadas por el Gobierno de La Rioja para financiar viviendas y rehabilitar el casco antiguo, que «son antiquísimas, del 86 y el 88».

«Nuestra situación financiera está saneada, es solvente, lo que nos permite ejecutar inversiones», afirma la responsable de las finanzas municipales, que afirma que las últimas operaciones crediticias se han realizado en «muy buenas condiciones», de tal manera que no es su amortización su principal motivo de preocupación.