Bodegas Familiares presenta vinos solidarios

Nuria Pajares Ramos
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La asociación que agrupa a los productores de carácter familiar mostrará en una cata en Riojaforum una añada "muy buena en general" y destinará la recaudación a la ONG Acnur

Clara Espinosa (izda.), Ana Jiménez y Rafael Pérez posan con el cartel de la Añada 2021. - Foto: Óscar Solorzano

Con una cifra récord de participación de 39 bodegas, las Bodegas Familiares de Rioja vuelven con la XXIV Cata Presentación de la Añada Rioja Baja, el próximo 14 de marzo en el vestíbulo del Palacio de Congresos de Riojaforum. Una celebración de su '30+1 aniversario' tras un parón por la pandemia, como presentó ayer Ana Jiménez, gerente de la asociación.

Será esta una manera de conocer el resultado de esta última vendimia, cuyo resultado fue "muy satisfactorio", como indica Rafael Pérez, de Bodegas Vallemayor, con una cosecha "muy buena en general y excelente para aquellos que tuvieron la paciencia de saber esperar" al mes de octubre. El resultado: "una uva con mucho color", y unos vinos "muy aromáticos" y "con muy buena capacidad y aptitud para el envejecimiento".

El acto, en el que se recoge el trabajo de cuarenta bodegueros, se abrirá de 17:00 a 19:00 para profesionales y de 19:00 a 21:00 para las personas aficionadas al vino. Las entradas no se podrán adquirir por adelantado, sino en taquilla, para un mejor control del aforo. 

Además, como señaló Jiménez, los diez euros del precio de los pases se donarán íntegramente a Acnur, en apoyo al pueblo ucraniano. "Es una cantidad simbólica, que no cubre ni una gotita, somos pequeñas bodegas y nuestras capacidades son limitadas, pero también pensamos que los pequeños gestos son los que mueven el mundo y lo hacen mejor", explicó.

El cartel de esta Añada 2021 recoge la esencia del Rioja, como explicó Clara Espinosa, de la bodega Señorío de Librares, en El Villar de Arnedo. Pues en su botella se representan los tres suelos  en los que germina la vid riojana: "Arcillo-calcareo, arcillo-ferroso y aluvial". Y es que, al comienzo se repartirá un mapa con colores diferenciados en el que se podrá localizar la variedad de vinos del evento por zonas, "a la izquierda, los de las zonas más frías, más occidentales, y  a la derecha los de las zonas más orientales o mediterráneas", diferenció.

Rafael Pérez, de Bodegas Vallemayor, hizo balance de la cosecha de este 2021, marcada "por la ausencia de lluvias durante prácticamente todo el verano", como recordó el bodeguero de Fuenmayor, pero "gracias a  una buena primavera hidrológica la añada se aventuraba tranquila", dando la vendimia su comienzo el 25 de agosto en Aldeanueva y finalizando en noviembre con los últimos varietales.

Los primeros días de septiembre se presentaron, como detalló Pérez, "con intensas lluvias" que provocó especiales daños en los viñedos, tanto en cepas como en terreno, de La Rioja Oriental, donde "se llegó a medir en algún punto hasta cien litros por metro cuadrado", cuando "apenas había recogido las variedades blancas más tempranas y se preparaba para cortar los primeros tempranillos". Agradeció, en esta línea, el esfuerzo de los viticultores en esta zona, que trabajaron "apenas habiendo recibido el 5% de las ayudas que se pidieron por daños".

 A esto se sumó la alerta  por la combinación de humedad y calor. Así las cosas, la vendimia pudo reactivarse durante las segunda semana  de septiembre "con menos daños de los previstos".

Acercándose las fechas de San Mateo, prosigue, "las lluvias provocaron un nuevo parón en la recogida", "aunque con menos virulencia"y fue ya en la última semana de mes cuando se activó la vendimia en Rioja Alta, Alavesa y en la zona oriental, "aunque de forma muy selectiva". 

Fue la de 2021 una vendimia "muy larga y atípica", ya que "las tres zonas de la Denominación coincidieron en la recogida, cuando habitualmente es escalonada por zonas". Coincidió, también,  la recogida de la uva blanca, "anterior normalmente a las tintas".

Pero, como suele decirse, la paciencia es la madre de la ciencia, y octubre "fue un mes extraordinario" de "días de sol y noches frescas, con contraste de temperaturas que permitieron una maduración pausada y muy equilibrada en grado alcohólico y con gran carga polifenólica". Siguiendo con el refranero, Pérez agradeció que "un buen día de octubre vale más que quince de septiembre".  Así, "no sin ciertos desvelos", desde Vallemayor, "podemos estar orgullosos de los vinos que podemos presentar este lunes y que daremos a probar a nuestros clientes".  La Asociación muestra sus ganas de reencontrars y ofrecer este viaje por la Denominación a través de sus vinos.

Incertidumbre ante Rusia

Estas pequeñas bodegas que componen la Asociación ya notan las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania, como avanzan Jiménez y Pérez, habiendo dejado de exportar a Rusia, "un país muy importante para nuestra Denominación y para las bodegas pequeñas", como indicó su gerente. 

Sin poder dar todavía unos datos reales, Jiménez estimó una aproximación de perdidas del 4,1% sumando Ucrania y Rusia, lo que aproximó que serían unos "20 millones de euros".

"Estamos muy paradas, pero si volvemos a los términos prepandémicos, ya estábamos mal", señaló al respecto, añadiendo la incertidumbre ante el gas, "muy importante en la elaboración del vino".

 A  esto se le suma también el problema en suministros, "que ya existía antes del conflicto". Pérez se refirió  a su encarecimiento y al alargamiento de los plazos de entrega. "Si cuando nos hacen pedidos, tenemos que retrasarlos porque no nos llegan las cápsulas hasta dentro de unos meses o las botellas, llueve sobre mojado".