La casta impone su ley en la novillada de Arnedo

Efe
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Los novillos de Lumbreras ganan la partida en el festejo sin picadores y con trofeo para Álvaro Chinchón y Fabio Jiménez

La casta impone su ley en la novillada de Arnedo - Foto: CBL

La casta de los novillos de la ganadería de Álvaro y Pablo Lumbreras se impuso en la novillada sin picadores celebrada ayer en Arnedo, en la que el  millar de aficionados asistentes disfrutó porque hubo emoción y el ganado dio juego por su bravura. Novillos muy bien presentados, todos ellos aplaudidos de salida y en el arrastre. Todos encastados, unos más bravos y otros menos, salvo el quinto, que ha sido el más noble. Todos ellos repetidores.

En el primero,  con casta, el madrileño Álvaro Chinchón empezó con series algo tropezadas en redondo, sin ningún tipo de hondura. Hubo muchos desarmes y por debajo de la calidad de las embestidas del novillo, que siempre fue a mejor.to.

El segundo apretó con buen tranco en banderillas y el torero de origen riojano Fabio Jiménez estuvo algo encimista y por momentos pareció no lucir lo que tenía que haber sido el novillo. Hubo algunos enganchones y un par de series limpias.

El tercero se trato de un novillo con mucho brío, transmitiendo lo que hacía, repetidor y con casta. Eric Olivera estuvo muy bien al inicio, doblándose para luego poderle, entendiendo muy bien la faena con series cortas bien entendidas ante un toro de gran pujanza. El problema es que mató muy mal.

El cuarto fue un novillo muy exigente, por bravo, con el defecto de que quiso irse, repetidor y codicioso, con muchos pases y al final una oreja. Y el quinto de la tarde fue más noble y también muy repetidor, aplaudido tanto de salida como en el arrastre. Con él estuvo muy correcto sin grandes alardes, pero el trofeo que podía haber caído en su esportón lo ha dejado de ganar porque ha estado muy mal con las espadas. Una faena discreta con un toro noble, que ha amarrado con las espadas.

El sexto, encastado, fijo y pronto, claramente desbordado por la casta.

Álvaro Chinchón: ovación y oreja.

Fabio Jiménez: oreja y ovación tras aviso.

Eric Olivera: silencio tras aviso y silencio.

 

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