El Promete ha continuado este sábado con su caída libre y ha encajado su cuarta derrota consecutiva, ante el IDK Euskotren, por 57-39, con lo que se aleja un poco más de jugar el play-off.

Más allá de la derrota, algo posible ante el quinto clasificado de la Liga Endesa, lo peor fue de nuevo la poca intensidad riojana, que llevó al Promete a quedarse por debajo de una media de 10 puntos por cuarto, algo complicado de entender cuando estaba en juego romper una mala dinámica y poder optar a la próxima ronda.

Además, el bache del Promete llegó tras un primer cuarto aceptable, en el que pese a no atacar bien, su defensa le permitió mantenerse en el partido (13-12).

Luego el choque siguió con unos guarismos muy pobres, impropios de equipos profesionales, que llegaron al descanso con un 25-21 que dejaba las cosas abiertas pero también ponía en muy mal lugar a dos plantillas que parecían no tener su día.

Quien rompió esa dinámica fue el equipo local, con un 20-10 de parcial en el tercer cuarto que, tal y como iba el partido, podía ser definitivo (45-31); y lo fue, porque el Promete no reaccionó y realizó otro último cuarto plano, sin ninguna opción de remontar, para terminar 18 puntos por detrás (57-39).

De los 39 puntos de las riojanas sus dos pívots, Diarrá y Geldof, anotaron 30 (14 y 16, respectivamente) y fueron las que sujetaron en muchos momentos a un equipo con un tiro exterior "dantesco", un 6 % de acierto en triples (1 de 17 intentos).

De hecho, esas dos jugadoras sumaron 24 y 19 puntos de valoración, pero la aportación negativa del resto fue tanta que entre todo el equipo riojano solo aportadon 26 puntos de valoración.

En el equipo local Cox anotó 22 puntos y Coulibaly 11.