A la espera de que se reúna la mesa de contratación, que hará oficial en el plazo aproximado de un mes el nombre de la empresa que se encargará de la construcción del primer centro de salud de España de la era poscovid, el logroñés de La Villanueva, la Consejería de Salud ha recibido once ofertas, lo que demuestra el interés del sector.

Con un presupuesto de licitación de algo más de 8,4 millones de euros, candidatas son dos empresas de La Rioja, cinco de fuera de la comunidad y hay tres UTE en las que participan empresas de la región; en una con un 20% de porcentaje, en otra con un 33% y en la tercera con un 50%.

El noveno centro de salud de Logroño, el de La Villanueva, que se ubicará en el solar que hasta hace poco más de un año ocupaba la antigua comisaría de Policía Nacional y que sustituirá al actual de Rodríguez Paterna, inaugura en nuestro país los centros de Primaria adaptados para dar  respuesta a  nuevas pandemias, lo que conlleva una serie de características de las que carecen los actuales.

Así, el futuro centro de salud de La Villanueva contempla circuitos sanitarios independientes que impidan la transmisión del virus y de otras enfermedades similares.  

«Su concepción se ajusta a lo que será un centro de salud de nueva generación, que va más allá de una infraestructura de Primaria al uso, pues permitirá zonas independientes», dice Alberto Lafuente, gerente del Servicio Riojano de Salud (SERIS), que explica que diferenciará entre área covid y otra que no lo sea, con entradas y salidas separadas. «Su concepción se ajusta a lo que será un centro de salud de nueva generación, que va más allá de una infraestructura de Primaria al uso, pues permitirá zonas independientes», añade el doctor.

Estas exigencias  no han sido óbice para que un número relativamente elevado de empresas opten a acometer una obra que ha de iniciarse este año, para lo que los presupuestos de La Rioja cuentan con una partida de 2,2 millones,  con la previsión de  que este listo en 2023, tras un plazo de ejecución de 22 meses.

Estas once empresas superan las recibidas por una de las últimas licitaciones que se han producido en Logroño, el espacio polivalente del parque Gallarza, que se ha previsto para sustituir a uno de los proyectos más polémicos de la época Gamarra, la Casa del Cuento. 

Esta actuación recibió siete ofertas y fue adjudicada el pasado noviembre por 318.000 euros y con seis meses de plazo a Obras de Construcción e Instalaciones S.A. (Ocisa).

Ahora bien, la cifra queda lejos de las 19 que recibió la Casa del Cuento que, finalmente, se adjudicaron a Eurocontratas-Ortiz por 1,7 millones tras una baja del 35%, aunque, un derrumbe primero, y el cambio de Gobierno municipal después, pusieron el colorín colorado al proyecto.

La misma cifra. Uno de los proyectos pendientes aún de ejecutar, el nudo de Vara de Rey, despertó igual interés que el centro de salud de La Villanueva en su licitación de junio de 2018. Sacado por 6,4 millones, recibió once propuestas para su constricción y fue, finalmente, adjudicad a la UTE formada por FCC y la riojana ASBECA,  por 4.9 millones y una rebaja del 22,4%.

La llegada al Gobierno municipal de Pablo Hermoso de Mendoza paralizó la actuación y cambió el proyecto, que debe todavía ser licitado, aunque en febrero se anunció que ya habían recibido luz verde para llevarlo adelante.

La mayor obra que se está en este momento acometiendo en  la ciudad, la reforma del instituto Sagasta, que se adjudicó por 21,34 millones de euros a la UTE Dragados SA-QODA, un 17,7% inferior al presupuesto de licitación de la obra, cifrado en 25,9 millones, recibió diez ofertas. Una  de ellas, Construcciones Mariano Navarro  y FCC Construcción, fue excluida por baja temeraria, lo que provocó que recurriera esta decisión, lo que llegó a paralizar las obras.