Riojanas: 67 días más de trabajo para igual paga que un varón

Feli Agustín
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Cerca del 85% de los empleos a jornada reducida son desempeñados por mujeres. Solo el 36% de las mujeres son directores y gerentes y su presencia en la industria es del 30,3%

Trabajadoras de Starglass en una imagen de archivo. - Foto: Ingrid

El 25 de marzo de 2011 tuvo lugar el siniestro industrial con más víctimas mortales en la historia de Nueva York y el cuarto en la historia de Estados Unidos. Ese día se desató un incendio en la fábrica de confección de camisas Triangle Waist Co, que causó la muerte de 146 personas (123 mujeres y 23 hombres), la mayoría chicas emigrantes de Europa del Este e Italia con edades entre 14 y 23 años. Ese suceso es el que se toma como referencia para celebrar el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer, que tendrá hoy en Logroño su hito central a las 7 de la tarde con la manifestación en la que miles de mujeres proclamarán que los 'Derechos en Igualdad garantizan democracia y libertad', y en el que volverán a reivindicar una igualdad en materia laboral que está aún lejos de acreditarse.

 Según la última Encuesta Anual de Estructura Salarial que ha publicado el INE con datos de 2020, la brecha salarial entre hombres y mujeres es, de media, de 4.705 euros, resultante de la diferencia entre lo que ganan los varones, 25.664 euros anuales, y  las mujeres, 20.959 euros. Esta brecha, de 5.175 euros, obligaría a las féminas a trabajar 67 días más al año para alcanzar el salario  de sus colegas masculinos, una desigualdad que responde a diversos factores, como la mayor temporalidad, parcialidad o la salida del mercado laboral para cuidar a hijos o mayores.

No obstante, La Rioja es la séptima comunidad autónoma con menor porcentaje de brecha salarial, que se situó en el 18,72% en el conjunto nacional en 2020, cuando la remuneración media de las mujeres fue de 22.467 euros brutos anuales, mientras que la de los varones ascendió a 27.642 euros.Ana Victoria del Vigo, secretaria de Empleo de UGT, destaca también que la desigualdad se manifiesta en otras áreas como en la tasa de actividad que la EPAa cierre de 2022, establecía que ha  alcanzando el 64,75 % entre los hombres, mientras que la femenina se queda en el 55,2 %.

La tasa de empleo, que se va recuperando tras la pandemia, muestra también la brecha entre hombres y mujeres y constata, destaca la responsable de UGT, que «cuando el empleo va bien, va mucho mejor para los hombres que para las mujeres»;y tras los malos tiempos «los varones recuperan antes el empleo que las mujeres». 

Así,  la diferencia se establece en el 9,55%, resultante de la resta de la  tasa masculina, del  59,03%,  frente a la 49,48  femenino, inferior, no obstante, al 11, 95% del 2021. Por contra, la tasa de paro afecta más a las mujeres, una situación que sufren el 10,26 frente a los 8,83 de los varones.

Diferencias sectoriales. La vicesecretaria de UGT destaca también como un aspecto que marca la desigualdad entre ambos sexos la ocupación que desempeña cada uno y las mujeres se concentran en el sector servicios, tradicionalmente con salarios más bajos. Así el cerca del 79,5% de administrativos y trabajadores de oficina o el 67% de los de comercio y servicios son féminas. Por contra, entre directores y gerentes, solo el 36,64% son mujeres y el porcentaje que trabaja en el sector industrial es del 30,3% sobre el total.

«Hay sectores femenizados, donde el trabajo está muy precarizado», afirma Del Vigo, que destaca la diferencia de entre ambos sexos en cuento  a la jornada a tiempo parcial, un indicador que refleja que en 2022, el 84,45% de los empleos  de este tipo estaba ejercido por mujeres;el 95% de los hombres trabajan a tiempo completo por el 77,6% de las mujeres. Destaca las medidas legislativas adoptadas este año, como la subida del SMI, que va a beneficiar principalmente a las mujeres, que son, en el 58% de los casos, sus perceptoras; y la normativa para trabajadoras del hogar, que tendrán derecho a desempleo. «La reforma laboral disminuirá también la temporalidad, otra de las desigualdades que sufrimos las mujeres», afirma Del Vigo, que resume que todas las desventajas durante la vid laboral tienen su reflejo  a la hora del cobro de las pensiones, con una diferencia que ronda el 35%

Sonia Sobrón, responsable de Igualdad de CCOO, coincide en la bondad de las medidas adoptadas por el Gobierno, pero considera que el avance es lento. «En la práctica, somos las que tenemos contratos temporales, jornadas reducidas o las que nos dedicamos a los cuidados», afirma, al tiempo que destaca la relevancia la educación en la igualdad desde la infancia. «Es fundamental para la concienciación y la sensibilización», resalta.