Salud busca garantizar la seguridad en visitas a residencias

El Día
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La consejera de Salud, Sara Alba, asegura que "hay que preparar" las residencias de mayores y "dar pasos seguros" para que la vuelta a la nueva normalidad en estos centros sociosanitarios "sea lo más segura"

Una mujer en una residencia de ancianos, en una imagen de archivo. - Foto: Europa Press

La consejera de Salud, Sara Alba, ha asegurado este miércoles que "hay que preparar" las residencias de mayores y "dar pasos seguros" para que la vuelta a la nueva normalidad en estos centros sociosanitarios "sea lo más segura". En este sentido se ha pronunciado la consejera, en declaraciones a los periodistas, al ser preguntada sobre la forma en la que el Gobierno de La Rioja va a organizar las visitas a las residencias de la tercera edad, una vez que esta comunidad está en la fase 2 de la desescalada.

La consejera ha recalcado que la apertura de las residencias de mayores hay que hacerla de manera "paulatina y con pasos seguros" tanto para "quien es visitado y para quien visite" al residente, dada la incidencia que ha tenido la COVID-19 en estos centros. Alba también ha eludido pronunciarse sobre la fecha en la que el Gobierno riojano solicitará pasar a la fase 3 por "prudencia".

Por su parte y en relación con las residencias de mayores, la Consejería de Servicios Sociales y a la Ciudadanía ha redactado un protocolo para regular nuevos ingresos en estos centros solo en casos de urgencia social, según ha informado el Gobierno riojano, en una nota. Se restringen los ingresos de nuevos residentes a aquellos casos en los que su situación social requiera de una atención urgente en una residencia como única opción posible .

El documento ya ha sido remitido a los centros y aclara que el personal médico de Atención Primaria o del hospital donde esté siendo atendida deberá emitir un informe médico que acredite que el nuevo residente no presenta síntomas, no es sospechoso o no es positivo en COVID-19. Es decir, el nuevo residente deberá tener una PCR negativa y, en cualquier caso, deberá permanecer en cuarentena durante catorce días en el centro residencial.

En caso de que durante el periodo de aislamiento, el nuevo usuario presente sintomatología COVID-19, el personal de la residencia deberá ponerse en contacto con el médico de atención primaria correspondiente y aplicar las indicaciones del protocolo de control de la epidemia en este tipo de centros.

Por su parte, el centro residencial deberá disponer entre dos y cinco habitaciones libres en función del número de plazas autorizadas, espacio que se destinará al aislamiento de la nueva persona usuaria. Los nuevos ingresos solo serán posibles cuando exista una urgencia social que acreditará un informe social de los Servicios Sociales Comunitarios.