Logroño satisface a San Bernabé con 1.500 raciones de toro

El Día
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Los logroñeses han cumplido con el voto de su patrón al acudir a degustar las raciones de toro guisado elaborado por la Federación de Peñas de Logroño

Varias personas disfrutan de las degustaciones de las peñas durante San Bernabé. - Foto: Óscar Solorzano

El domingo 12 de junio pone fin un año más a los actos festivos de San Bernabé y, como no podía ser de otra forma, los logroñeses cumplen con el voto de de su patrón al acudir a degustar unas 1.500 raciones de toro guisado elaborado por la Federación de Peñas de Logroño.

Una temperatura más fresca que en las jornadas pasadas de las fiestas animaron a cientos de ciudadanos a acudir a la calle Portales, donde se formaron largas colas para conseguir las raciones de carne guisada, acompañada por vino tinto en un vaso conmemorativo. De hecho, la expectación se vivía en el casco antiguo desde horas antes de esta ceremonia, ya que a escasos metros, en la concatedral de La Redonda, comenzaba la procesión del Santo, con el equipo de gobierno local siguiendo de cerca a la banda en su desfile.

También muchas personas acudían antes de la hora oficial de la cata para asegurarse un buen sitio y su pieza de toro guisado. Y hacían bien en ser previsores, pues pronto las colas sobrepasaban el Arco de San Bernabé, quedando más cerca la cola del ayuntamiento que de la misma Plaza del Mercado.

Como reoge la agencia Efe en un comunicado, la finalidad de este acto es agradecer al santo el triunfo de la ciudad tras el asedio del ejército francés en 1521, por lo que el voto ya ha cumplido los 500 años de historia.

El presidente de la Federación de Peñas, Javier Ansoleaga, detallaba a los periodistas que, en la elaboración de este acto, se emplean unos 200 kilos de carne, ternera y toro.

Ansoleaga resaltó la gran acogida de los ciudadanos a las peñas durante estas fiestas, especialmente durante las degustaciones gastronómicas que organizaron y con las actividades de las charangas.

«Las peñas tenían muchas ganas de volver a las calles después del parón de la pandemia, así que San Bernabé ha sido un ensayo general para las fiestas de San Mateo de septiembre», aseguró.

Del lado de los asistentes destacan las personas que, un año más, se vuelcan con la ciudad en estos actos festivos. Es el caso de Carmen, que asegura «no me he perdido ninguno de los actos. Hay que disfrutar ahora, porque se ha pasado muy mal durante la pandemia y estos son los momentos en los que tenemos que volver a sentirnos como antes».

De hecho y, sobre la gran oferta cultural y gastronómica de Logroño en esta semana, reconoce que «sí que es imposible asistir a todo, porque está muy repartido y hay eventos a las mismas horas», aunque reconoce que es algo «fantástico, ya que permite satisfacer a la mayor cantidad posible de personas con múltiples gustos y preferecias».

También asisten a la degustación del toro guisado Matilde y Fernando, que llegan desde la misa en sufragio por los héroes de la defensa de la Ciudad en 1521, que tuvo lugar en la concatedral de La Redonda. Mientras aguardan en la cola para obtener su guiso, mantienen una conversación sobre el mismo. Matilde advierte a su marido de que lo que van a comer no es realmente toro, ya que «eso era antiguamente pero ahora se hace con ternera». Pero Fernando lo pone en cuestión y asegura que «hasta el rabo, todo es toro».

Las peñas, firmes con la ciudad y su patrón

Esta federación agrupa a nueve peñas de Logroño, que suman un millar de peñistas, con el objetivo de sumar nuevos miembros para suplir las bajas de la pandemia.

En esta última jornada festiva, los miembros de la Corporación asistieron a una misa por los héroes en defensa de la ciudad en la concatedral de La Redonda y después participaron en una procesión con la imagen del Santo organizada por la Cofradía de San Bernabé.

La agenda del domingo incluye representaciones teatrales, una comida renacentista con las asociaciones recreacinistas y voluntarios, además de actuaciones callejeras.

San Bernabé de 2022 concluirá con el acto de homenaje a la ciudad, que incluye la representación teatral de la llegada de Carlos V y la entrega de la flor de lis al escudo de Logroño.