Con 591 millones de hablantes en el mundo, lo que equivale al 7,5% de la población mundial, el español es la segunda lengua materna  por número de hablantes, tras el chino mandarín. Así lo recoge la publicación El español en el mundo 2021, la última de sus características editada por el Instituto Cervantes que conformará, junto a los ministerios de Asuntos Exteriores, Asuntos Económicos y Educación, el  Observatorio Global del Español, que se instalará en La Rioja, cuyo Gobierno también formará parte del nuevo organismo.

Así lo aprobó ayer el Consejo de Ministros, que informó de que la función de este centro «de análisis y prospectiva», que se enmarca dentro del desarrollo del Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) de la  Nueva economía de la lengua,  será fomentar el conocimiento y prestigio de la lengua y las culturas hispánicas en el proceso de transformación digital.

El centro dota de dimensión «global» a uno de los proyectos de transformación elaborados por La Rioja, el Valle de la Lengua, gracias al trabajo conjunto con el Gobierno de España, afirmó la presidenta riojana, Concha Andreu,  que destacó que La Rioja será «el lugar donde se escribirá el futuro del español», además de atesorar una historia milenaria en torno a la lengua.

El Observatorio está en La Rioja, añadió, porque «hemos diseñado y puesto en marcha el proyecto Valle de la Lengua, que apuesta claramente por la transformación de La Rioja y de España a través del español en todas sus dimensiones».

El Observatorio se ocupará de analizar la situación del español y de las lenguas cooficiales en el mundo, en particular en la nueva economía digital y de desarrollar estudios y «hacer propuestas de gran valor para hacer de la lengua un elemento tractor del crecimiento económico». Es uno de los proyectos «tractores y transversales» del Perte de la lengua, y participará de forma directa en el proceso de toma de decisiones y ejecución de sus actividades.

Con una inversión de cuatro millones, que financiarán todos los socios del Observatorio, serán también estos los que aporten el personal del organismo, que podrá complementarse con trabajadores externos para la realización de encomiendas específicas.

Así lo explicó el delegado de la Presidencia para el Plan de Transformación, José Ignacio Castresana, quien no despejó la duda de la ubicación del centro, que bien podría ser el monasterio de Yuso en San Millán [hay fondos para su adaptación], aunque no descartó otros emplazamiento según las necesidades o la colaboración de empresas privadas.

«El Observatorio tiene un marcado carácter económico para detectar oportunidades en cuanto se produzcan», avanzó Castresana, que resumió que tiene como misión «ver y observar» el futuro del español, una lengua que es clave para el desarrollo  económico en un mundo en el que la comunidad hispanohablante tiene un poder de compra conjunto de aproximadamente el 9 % del PIB mundial. Es más, el español ha experimentado un crecimiento en internet del 1.511 % en el periodo 2000-2020, frente al incremento del 743 % registrado por el inglés.

En el centro. Castresana insistió en que este Observatorio coloca a La Rioja «en el centro mismo de la nueva economía de la lengua», donde el español representa un elemento clave para la competitividad de La Rioja, de España y los países hispanohablantes. Concebido como  centro de análisis, aportará la visión y el conocimiento estratégico para el despliegue del Perte, tiende carácter transversal y se establece como «guía» para el desarrollo del resto de estrategias de la Nueva economía de la lengua. Entre sus funciones, destacan la recogida y análisis permanente de información en torno a la situación del español en diferentes ámbitos a escala internacional y la formulación de recomendaciones y propuestas de actuación en el ámbito de la nueva economía de la lengua.

Orientará también las decisiones estratégicas de las industrias que se van a desarrollar en el Valle de la Lengua en todas sus dimensiones: aprendizaje, turismo, cultura, ciencia e inteligencia artificial y coordinará e integrará los observatorios temáticos existentes ubicados en diferentes países .

«Se trata de un Observatorio de carácter económico, del potencial del español como elemento de competitividad y como motor de desarrollo económico», reiteró el delegado de la Presidencia para el Plan de Transformación, que coincidió con Andreu en que La Rioja «tiene la materia prima» de la nueva revolución. Precisamente, la presidenta presumió de que «con hitos como este, estamos escribiendo, además, el futuro de La Rioja: un futuro ilusionante, de prosperidad y crecimiento; un futuro donde nuestra comunidad autónoma ya no va a ser una mera espectadora, sino protagonista».