La temporada 22-23 ya ha consumido dos de sus 38 capítulos regulares y, por el momento, la situación no es buena para los tres representantes riojanos que aún no conocen la victoria. La única noticia positiva es que se presume tanta igualdad que tanto Calahorra, como Unión Deportiva Logroñés y Sociedad Deportiva Logroñés, en riguroso orden clasificatoria, están muy cerca de su objetivo pese a que solo hayan sumado, entre los tres, tres puntos de dieciocho en juego.

El Calahorra, que parte con la vitola de candidato al descenso, es el club riojano que mejor se ha comportado hasta la fecha y eso que la pretemporada ofreció sensaciones negativas.

El equipo de Juan García, con Miguel Martínez, Barace, Álex Arias y Zubiri como únicos supervivientes del pasado curso, se ha comportado en la Nueva Condomina y LaPlanilla como un equipo hecho, madura, difícil de domesticar.

Ante el Murcia, uno de los colíderes, los calagurritanos aguantaron y suya fue la última ocasión del partido. El 0-0 apuntó unas buenas sensaciones que se confirmaron este domingo ante el Sanse. El 1-1 no hizo justicia en el marcador en un encuentro muy bien gestionado por los rojillos.

Baselga, al borde del descanso, estrenó el capítulo goleador de un Calahorra que, por volumen de ocasiones, mereció algo más.

Los dos empates en igual número de encuentros alejan a los riojabajeños del descenso aunque la sensación del aficionado rojillo es que el equipo lleva menos puntos de los que debería.

Con todo, el inicio de los calagurritanos es el mejor de los tres representantes riojanos de la categoría. Las prestaciones, por ahora, de UDLy SDL no invitan  al optimismo. 

Irregular. La Unión Deportiva Logroñés recibió el sábado un baño de realidad al caer 0-1 ante el BilbaoAthletic, marcador que se antoja injusto a tenor de las cinco oportunidades meridianas de las que dispusieron Vinicius Tanque, Clau Mendes, Schutte y Pichín.

Si el empate en el Nou Estadi de Tarragona invitó al optimismo, la derrota supone un duro contratiempo para unos aficionados que, desde pretemporada, han creído en las opciones blanquirrojas.

La mejor noticia para los intereses de los logroñeses es que ningún equipo ha firmado el pleno y que rivales directísimos por el 'play off' como Sabadell, Eldense o Numancia están a su misma altura (1 punto)mientras que Baleares o Nàstic solo suman uno más.

La próxima quincena, con duelos ante Real Unión y SDL, determinarán el zeitgeist de los seguidores blanquirrojos que, de momento, han comprobado las exigencias de un grupo plagado de aspirantes al ascenso.

El farolillo rojo del fútbol riojano, y casi del Grupo 2, es la Sociedad Deportiva Logroñés, penúltimo clasificado con dos derrotas en igual número de encuentros.

El once riojano tiene un problema: su inconsistencia defensiva. Los de Llona recibieron cuatro en Urritxe, en el mejor encuentro de la jornada. El Amorebieta necesitó cuatro dianas (en apenas seis aproximaciones a portería) para domesticar al conjunto riojano, que generó una decena de ocasiones de las que solo aprovechó dos. El Alcoyano precisó solo una para expugnar Las Gaunas en el debut. Con un balance de cinco goles encajados y solo dos anotados, los riojanos tienen mucho margen de mejora aunque el calendario no da tregua.

Este domingo, a las doce horas, los de Llona reciben A La Nucía, colíder de la clasificación. Siete días después afrontarán el derbi. La situación no preocupa pero a nadie se le escapa que si los blanquirrojos no blindan su portería se hipotecarán seriamente su futuro en 1ªRFEF.