La recuperación económica se está demorando más de lo previsto en España ante los efectos y limitaciones que ha provocado la tercera ola de la COVID-19, lo que supone un freno al crecimiento del tejido productivo, principalmente de los sectores del turismo y comercio, lo que ha llevado al servicio de estudios del BBVA Research a mantener su previsión de expansión del PIB para este año en el 5,5% y en el 7% en 2022, a la vez que dispara su pronóstico del déficit público al 8,5%, aunque considera que, si se avanza en los planes de vacunación anunciados por el Ejecutivo, «el sesgo de sus previsiones podría ser al alza».
Así figura en el último informe Situación España del BBVA Research correspondiente al primer trimestre del año y presentado este jueves telemáticamente por el director de BBVA Research y economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia; el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, y el economista jefe para España, Miguel Cardoso.
Los responsable del análisis destacaron que tras el estancamiento del PIB en el último trimestre de 2020, la economía española se volvió a contraer en estos primeros meses de 2021 hasta registrar una desacerelación del 0,9% como consecuencia del deterioro observado en los indicadores sanitarios, de la salida del Reino Unido de la UE, del impacto de la tormenta Filomena y el alza en el coste de la energía.
Según señaló Doménech, para el segundo trimestre, el BBVA prevé una recuperación del 1,3% y una aceleración más intensa entre julio y septiembre, del 3,4%. «Lo perdido en el arranque de año se ve compensado con la mejora prevista para la segunda mitad », sobre todo a partir de la campaña de verano que espera que la economía se vaya acelerando los próximos meses registrando tasas de crecimiento elevadas a partir del segundo trimestre, favorecida por un entorno internacional con políticas de demanda ambiciosas, sobre todo en EEUU, los fondos europeos y la vacunación.
Para el servicio de estudios, la extensión de los ERTE y de las ayudas a autónomos dará certidumbre a las actividades más afectadas por la crisis y permitirá mantener puestos de trabajo y tejido productivo, que podrían reactivarse una vez que el sector servicios comience la recuperación final.
Ayudas
Además, estimó «especialmente positivo» que buena parte del paquete de ayudas para pymes y autónomos anunciado por el Gobierno (11.000 millones de euros) se concentre en subvenciones directas (7.000 millones de euros) y que sean finalistas y sectoriales, a la vez que se amplía el abanico de sectores beneficiarios respecto de los contemplados para los ERTEs.
Respecto a la reforma de las pensiones que se está debatiendo en el marco del Pacto de Toledo, señaló que «lo que les preocupa desde el BBVA es que se traslade el déficit de la Seguridad Social al Estado porque, con ello, no estaríamos resolviendo el problema de sostenibilidad y no lo estaríamos enfocando adecuadamente», apostillo, tras apuntar que preferiría ver otro tipo de reforma gradual del déficit.