Agustín Prado, nació en Mendoza, Argentina, en 1986. Después de vivir en ciudades de todo el mundo, como de Estados Unidos, Chile, Italia y Lituania, el joven monje del Instituto del Verbo Encarnado llegó a España en 2016, y acabó en La Rioja en noviembre de 2017, donde vive desde entonces. Su casa y hogar es desde esa fecha uno de los lugares más privilegiados de la región, Valvanera, donde es prior del monasterio. Cenobio que ha modernizado desde su llegada. Pero Prado reconoce que también le gusta viajar por La Rioja, conocerla y en especial sus monasterios. Estos son sus lugares favoritos.
1. Valvanera. Como no podía ser de otra forma, el lugar favorito de La Rioja del prior del Monasterio de la patrona riojana es Valvanera, donde pasa la mayor parte de su tiempo de labor y también de ocio, «porque te puedes pasar horas contemplando estos paisajes». «Los motivos son obvios, cualquiera que visite este lugar va a decir que es el mejor lugar de La Rioja, porque es la casa de la Patrona, la Virgen de Valvanera, pero también por el entorno, la naturaleza, el paisaje, los bosques y el monte que visten este sitio además de las pequeñas venas de agua que dan vida al lugar. Y personalmente, porque nunca se está mejor que en casa. Y esta es mi casa».
2. Anguiano. En realidad el monasterio de Valvanera pertenece al término municipal de Anguiano, pero Prado no elige este lugar solo por la cercanía, sino por la tradición que representa este lugar, «he estado dos veces viendo a los danzadores de Anguiano y me pareció muy bonito, además de importante el que quieran mantener esta tradición». Pero tampoco se quiere olvidar de lugares tan bonitos de esta localidad como la ermita de Santa María Magdalena o el puente de piedra.
3. Pico de San Lorenzo. «Me gusta mucho la montaña», asegura el prior, «y la que más, el pico más alto de La Rioja, el techo de la región». Sube todos los años por el día de San Lorenzo, en agosto, a decir misa ahí «y me acompañan muchos peregrinos y también está ahí Valvanera». Para Prado es un día muy especial y ya no solo por la compañía , «sino por las vistas de las que puedes disfrutar desde ahí».
4. San Millán. De monasterio a monasterio. Para el prior de Valvanera ‘su’ monasterio es el más bonito de La Rioja, pero tampoco quiere desmerecer al que supone un gran icono de la cultura ya que es la cuna del castellano. Los monasterios de Yuso y Suso «son una joya», reconoce. Además, tiene un gran contacto con los monjes, «estamos hermanados con los agustinos recoletos de San Millán, por cercanía, familiaridad y amistad». Me siento muy bien allí. Además cuando fui viví mi primer Día de La Rioja, con todo lo que supone ese acto».
5. Monasterio de Vico. Otro monasterio caprichoso con unas vistas curiosas es el de Vico, en Arnedo, donde el prior estuvo poco tiempo «pero me encantó el lugar». Desde ahí se puede ver una parte muy bonita de todo el valle del Cidacos. Y las hermanas que lo habitan «hacen unos dulces muy buenos que tuve la oportunidad de probar». Además, el inmueble en sí, en la parte de la iglesia ha sido remodelado y tras las obras ha sacado a la luz una cripta, «que me pareció un lugar muy especial por la luz, la forma. Eso tuvo que tener mucha historia».
6. Ezcaray. Tanto en verano como en invierno, Ezcaray tiene un encanto especial, «tanto el pueblo como sus gentes», explica el prior. El mismo reconoce que además de Ezcaray, Valdezcaray es una riqueza más para La Rioja, y muy importante que en una región tan pequeña haya una estación de esquí. Servicio al que va de vez en cuando con algún monje más para hacer deporte en invierno.
7. El puente de Hierro de Logroño. «El puente de hierro lo vi por primera vez de noche. Y me pareció un sitio muy especial con esas luces sobre el río Ebro que deja rincones tan especiales». Estuve allí, en el puente con mi familia, mi madre y mi hermana, cuando vinieron a verme a España, después de muchos meses sin verlas. Era un día que jugaba España algún partido de fútbol importante, no había nadie por las calles, fue un momento mágico, el silencio, la compañía».
8. Enciso. El barranco perdido. Estuvo en su primer verano en La Rioja con un campamento de chicos. Y lo que más le sorprendió fue que en un lugar y un pueblo tan pequeño dentro de La Rioja hubiera un parque de aventuras con tanto atractivo. «Lo pasamos realmente bien». Es un lugar al que deberían acudir muchos chavales, porque además se aprende mucho de los dinosaurios.
9. Briones. El prior también quiere hacer alusión a uno de los paisajes más bonitos de La Rioja, sus viñas. «En otoño es espectacular, vosotros lo veis todos los otoños, pero para mi cuando vi por primera vez los campos de viñas con sus diversos colores me parecieron una preciosidad». Prado ha elegido Briones porque conoció aquí su primera bodega riojana. Y también estuvo en el Museo Vivanco, «que me pareció muy completo, en el que se muestra mucha historia, además de patrimonio».
10. Nájera. Otro monasterio especial para Prado es Santa María La Real. «Y Nájera es una localidad muy bonita por sus gentes y por todos los que pasan por ahí por el Camino de Santiago».