Desmantelado un grupo internacional de robo de catalizadores

El Día
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La Policía Nacional ha desarticulado la banda en La Rioja. Hay cuatro detenidos por sustraer estas piezas en vehículos estacionados en Logroño, de las que extraen metales preciosos como el platino, rodio y paladio para la venta ilícita

Un agente examina uno de los coches afectados. En la imagen de detalle, el metal que extraen para su venta ilícita. - Foto: Policía Nacional

La Policía Nacional ha desarticulado en La Rioja un grupo criminal internacional especializado en la sustracción de catalizadores coches, con cuatro varones detenidos como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal y hurto.

La Jefatura Superior de Policía de La Rioja ha detallado este viernes, en una nota, que agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) han detenido en la "Operación Escape" a los presuntos autores de 23 catalizadores, de edades entre 23 y 41 años y que actuaban en la zona norte de España.

Los presuntos autores del robo, procedentes todos de Rumanía, fueron detenidos por agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaria de Distrito de Retiro, Alcalá de Henares y la comisaria de Ciudad Lineal, todas en Madrid.

Los cuatro detenidos formaban parte de una red organizada y especializada en la sustracción de catalizadores, fundamentalmente de vehículos estacionados tanto en la vía pública como en diferentes aparcamientos subterráneos de Logroño.

La banda actuaba principalmente en zonas periféricas, probablemente por la existencia de vías rápidas de escape próximas para una mayor seguridad de los autores de los hechos.

Desde el marzo del año pasado, a raíz del aumento significativo de robos piezas exteriores instaladas en el sistema de combustión de los vehículo tanto diésel como gasolina, comenzaron las investigaciones policiales tras recibir las primeras denuncias.

La sustracción de los catalizadores, que son piezas "muy cotizadas en el mercado negro" según la Policía, había provocado "graves perjuicios a los propietarios" de los vehículos.

Los catalizadores no pueden ser usados en la generalidad de los vehículos, de modo que coches de la misma marca y modelo llevan modelos diferentes, cuyo precio puede alcanzar los 5.000 euros.

Estos elementos están realizados con metales como platino, rodio y paladio, ha detallado la Policía.

El precio del platino se sitúa en torno a los 30 euros el gramo, el precio del paladio supera los 60 euros el gramo y por su parte el rodio se dispara hasta sobrepasar los 800 euros el gramo.

La sustracción de los catalizadores es un procedimiento sencillo, basta soltar los tornillos que le unen al tubo de escape y al silenciador, pero, dado que no se busca su reutilización, es más rápido y eficaz cortar los tubos con las herramientas apropiadas.

Para el esclarecimiento e investigación de estos los hechos, los investigadores en una primera fase centraron sus esfuerzos en detectar y localizar al grupo criminal que operaba en Logroño y en diferentes zonas limítrofes.

Así, primero se detuvo en febrero pasado a tres varones, como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal y hurto, y se recuperaron 12 catalizadores.

También encontraron diversas herramientas necesarias para poder desmontar las piezas de los vehículos, entre ellas, hojas de sierra para metal, dos gatos hidráulicos y una herramienta artesanal especialmente fabricada para la fractura de los tubos.

Posteriormente a esta operación, se recibieron nuevamente denuncias en la Jefatura Superior de La Rioja, por lo que puso en marcha un dispositivo especial para proceder a la localización, identificación y posterior detención de los supuestos responsables de estos robos.

Los presuntos autores de los hechos se desplazaban hasta Logroño en vehículos particulares sin hacer ningún tipo de hospedaje fin de evitar dejar el rastro y llegaron en ocasiones a abordar su actividad delictiva en varias localidades limítrofes en una misma noche.

Una vez que los investigadores localizaron a los responsables pudieron comprobar su alto grado de especialización, tanto en el desarrollo de este tipo de actividad delictiva, como para intentar evadir la acción policial.

Los detenidos llevaban a cabo su actividad con especial predilección por vehículos de determinadas marcas comerciales y pasaban horas en los aparcamientos buscando coches y modelos concretos para sustraer su catalizador.