Mientras el Real Madrid masculino cuenta los días que faltan para la final de la Champions, el Barcelona femenino hace lo propio con la Liga de Campeones, por la que lucharán el próximo sábado contra el Olympique de Lyon, el último escollo que tienen para firmar una temporada perfecta. 

Ayer, el presidente de la entidad culé, Joan Laporta, visitó a la plantilla y cuerpo técnico del Barça Femení, antes del entrenamiento en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, para darles ánimos de cara a la final de Turín.

El equipo de Jonatan Giráldez llevará a cabo la última sesión en las instalaciones del club hoy, y mañana por la mañana se desplazará hacia Italia, donde tendrá lugar el entrenamiento y las ruedas de prensa oficiales, ya por la tarde.

El Barça femenino no se cansa de hacer historia, tanto en lo social como en lo deportivo, y el pasado domingo sumó un nuevo logro al completar la Primera Ibedrola femenina con un pleno de triunfos en las 30 jornadas disputadas tras revalidar el título hace semanas.

Precisamente, consiguió la última victoria ante el Atlético de Madrid, el único rival ante el que no sumó los tres puntos el curso pasado. Así, iguala el hito que hasta ahora tan solo tenía el Levante, que ganó la Liga 2000/01 ganando los 28 encuentros disputados entre la Liga regular y el 'play-off' por el título.

En la Champions, las culés, que se la llevaron el año pasado, también han sido un 'rodillo', tanto en la fase de grupos como en las eliminatorias. De eso pueden dar fe tanto el Real Madrid como el Wolfsburgo.  

Alexia, cauta

No obstante, a pesar de ser a día de hoy un auténtico 'Dream Team', las jugadoras blaugranas tienen los pies en el suelo, comenzando por su capitana y actual Balón de Oro, Alexia Putellas. «Si hay algo más complicado que ganar es volver a ganar, repetirlo, volver a superarte, y eso es muy complicado», señaló el pasado martes la catalana, que añadió:«También desgasta muchísimo, pero vale la pena cada segundo».

Asimismo, reconoció lo complicado de igualar la gesta de los cinco títulos consecutivos del Olympique de Lyon, su rival en la final. «No sé si algún equipo lo volverá a hacer. Está claro que es un reto para todos los equipos intentar alcanzar lo que ellas hicieron. Tenemos una plantilla muy amplia con diferentes perfiles que nos ayuda a ser mucho más imprevisibles», apuntó.

En principio, el Barça es claro favorito, pero la experiencia es un grado y el equipo quiere demostrarlo en el campo y no fuera de él.