El portavoz del grupo municipal de Cs en el Ayuntamiento de Logroño, Ignacio Tricio, ha pedido a «quien corresponda» la convocatoria de una asamblea extraordinaria urgente del partido tras la salida de dos de los cuatro concejales, Marisa Bermejo y Javier Garijo, y de los «vergonzosos» sucesos acaecidos en el pleno de ayer, en referencia a la expulsión del pleno del Ayuntamiento de Logroño de su todavía compañera, Rocío Fernández.

«Los problemas de cada partido debemos lavarlos en nuestras casas», afirmó ante el cartel de ‘trásfugas’ que colocó en su pupitre Fernández, cuyo desalojo del pleno municipal animó Tricio.

«Existe un incendio incontrolado que si no lo apagamos urgentemente arrasará con todo y con todos», reflexiona en su petición de una convocatoria urgente de asamblea, texto en el que apuesta por hablar «abiertamente» de la marcha de los dos concejales.

«No son los primeros en hacerlo en nuestra Comunidad, y creo que todos los cargos y afiliados deben saber y poder preguntar qué está pasando para que sucedan actuaciones como estas», argumenta Tricio, que critica de manera velada al partido al afirmar que «no solo deben leer el comunicado de los concejales y el que nosotros como partido enviamos a los medios».

El portavoz municipal de Cs incide en este reproche y señala que «estamos supuestamente en un partido que aboga por la transparencia» y constata que el abandono de dos concejales de Logroño, que no han entregado sus actas y permanecer como no adscritos en el Ayuntamiento, «no solo repercute» en la agrupación local, sino en La Rioja y el futuro de Ciudadanos. 

«La verdad». Por su parte, Rocío Fernández, que se encuentra liberada, al igual que el portavoz del grupo, Ignacio Tricio, defendió su actuación tras la expulsión del pleno. «Yo lo único que he dicho es la verdad», aseguró la concejal, que destacó que tiene el «derecho» a expresarse y manifestar sus opiniones. Evitó, a pesar de la reiteración de preguntas, opinar sobre la postura adoptada en el pleno por el portavoz municipal de Cs, grupo que se verá afectado económicamente por la salida de dos concejales, aunque dijo no saber las condiciones. No obstante, entiende que la asignación que percibe el grupo, que asciende este año a 61.242,87, se verá minorada, mientras los dos concejales que pasan a ser no adscritos  percibirán su retribución por asistencia a pleno o comisiones.

«No hemos hablado del tema», asegura la concejal, que tampoco quiso valorar la respuesta del grupo a la salida de Bermejo y Garijo. «Yo he dicho lo que son de una manera muy clara», respondió tras siete segundos de silencio;«yo he querido ser clara y libre, y lo he dicho», zanjó.