Distinciones estatales a dos ángeles de la guarda

Bárbara Moreno
-

El policía nacional David Redondo y el joven Camilo Rivera reciben hoy las medallas al Mérito de la Protección Civil en La Rioja por salvar a un bebé en Logroño y a una mujer en Calahorra

Diego Redondo y Camilo Medina son ejemplo de dos ciudadanos que salvaron a dos personas por puro instinto a pesar de que el primero de ellos sea Policía Nacional, pero es consciente de que ese sentimiento interno en forma de impulso reflejo le pudo por encima de todo. El primero, mientras patrullaba, salvó a un bebé en la calle que no respiraba.  Y el segundo subió a por una mujer que estaba colgada del balcón de un segundo piso de su casa. Ambos casos acabaron afortunadamente en final feliz gracias a dos ángeles de la guarda y al destino de que ambos estuvieran allí. Algo que no suele suceder. Yel Estado otorga reconocimientos en forma de medalla, que distinguen actuaciones excepcionales para proteger a personas y servicios a la ciudadanía que contribuyen de forma especial a su seguridad y a mejorar su calidad de vida. 

Con todo, el Gobierno de España ha concedido las medallas al Mérito de la Protección Civil en La Rioja al policía nacional David Redondo Ibáñez por salvar  al bebé en Logroño y al joven Juan Camilo Medina Rivera por rescatar a aquella mujer en Calahorra. Hoy serán entregadas en un acto presidido por la delegada del Gobierno en La Rioja,Beatriz Arráiz y la presidenta del Gobierno, Concha Andreu, en la sala cultural Ermita de la Concepción de Calahorra. 

 La distinción por tanto reconoce la actuación de Redondo en la madrugada del 24 de julio de 2021, cuando, mientras realizaba labores de prevención en Logroño junto a otro compañero, salvó la vida a un bebé al practicarle una masaje cardiaco tras comprobar que no respiraba ni respondía a estímulos. El policía nacional que después de 12 años patrullando en Logroño ha sido destinado a su tierra, a Santander, explicaba ayer a El Día de La Rioja que ««el reconocimiento me lo dan particularmente a mi y es un honor recibir la medalla, pero es un reconocimiento para todos los compañeros de la Policía de La Rioja, en especial para mi compañero de patrulla de esa noche, Juan Antonio Díez». «Es un orgullo recibir una medalla porque no estamos acostumbrados a que se reconozcan estas labores cotidianas».

«Fue muy bonito recordarlo ahora», asegura Redondo, «pero aquél día no fue tan agradable, la madre me entregó en mis brazos un bebe de 2 años diciéndome que no respiraba, fue un mal momento», recuerda, mientras explica que iba patrullando por la ciudad, mientras su compañero y él vieron que un coche iba muy rápido, fueron detrás de él y fue cuando la madre salió con el niño que no respiraba y se lo puso en los brazos, «me lo puso a mi porque era el copiloto y salí antes, si hubiera salido mi compañero hubiera sido a él, procedí a hacerle la respiración cardiorespiratoria con el bebé encima de mis rodillas. En cuanto vimos que respiraba fuimos corriendo al hospital. La madre nos envió una carta de agradecimiento y nos indicó que el diagnóstico fue insuficiencia respiratoria grave, bronco espasmos severos, neumonía, derrame pericardio y más cosas. No le volvimos a ver». Para muchos, Redondo fue el ángel de la guarda de aquél niño, por su pronta actuación, pero él considera «que el ángel de la guarda lo tuvimos nosotros».  

Por otro lado, el Gobierno de España ha reconocido a Camilo Medina Rivera porque, el 3 de mayo de 2021, observó que una mujer estaba atrapada en la barandilla de un balcón de su vivienda en Calahorra y trepó por la fachada del edificio para salvarla. Camilo reconoce que cuando le llamó la delegada para informarle de tal distinción quedó muy agradecido e incluso sorprendido «porque es algo que ves en las películas pero no te crees que existe». 

Recuerda cómo aquél día su padre entró en la tienda y dijo que una mujer de más de 70 años, estaba por la barandilla «y no lo pensé cogí una escalera y fui a por ella, la metí en casa, cerré el balcón, intenté tranquilizarla y estuve hablando con ella hasta que llegaron los servicios de emergencias». Cuando bajó a la calle recuerda que fue de película, «la gente aplaudía», y claro, se ha ganado el apodo de spiderman entre sus amigos. Este chico que entonces tenía 24 años tiene algo claro, «que hay que trabajar más a nivel nacional por la Salud Mental». «No hay un plan nacional por ejemplo contra el suicidio, y es muy importante y necesario, porque cada dos horas y media se muere una persona en España, es ya la primera causa de muerte en adolescentes». Él lo sabe muy bien como psicólogo, y porque ve en el día a día que la salud mental  debe tenerse más en cuenta.