Queda algo más de dos meses para que el tradicional Sorteo de Lotería de Navidad se celebre y las administraciones riojanas ya notan el trajín de clientes en busca del décimo esperan sea el agraciado con el Premio Gordo y así poder cambiar sus vidas. Por ello, las administraciones de Lotería afrontan la época con más trabajo del año con «buenas expectativas», en las ventas de décimos y participaciones. Tras dos años aciagos marcados por las restricciones de la pandemia, las ventas han experimentado un 10 por ciento con respecto a la misma época del año anterior, según indica el presidente de la Asociación de Loterías de la Federación de Empresarios de La Rioja (FER), Ángel Alda que, además, regenta la administración número 6, situada en la calle Muro de la Mata de Logroño.
Por su parte, Carlos Ruiz, delegado comercial de Loterías y Apuestas del Estado, más cauto asegura que «aunque hay buenos augurios y sensaciones este año no sabremos la cantidad de lo recaudado hasta el día de antes del sorteo, el 22 de diciembre». Además, Ruiz recuerda que Loterías y Apuestas del Estado informará de los datos de consignación de cada comunidad. «Las administraciones están animadas porque hemos pasado años muy complicados, en 2020 hasta se barajó la posibilidad de suspender el sorteo», apunta.
Los loteros esperan dejar esos datos atrás e ir recuperando los de 2019 gracias al aumento de la movilidad de turistas de otras comunidades. «Cuando viene más gente de fuera es habitual que se venda más lotería», asegura Ruiz.
Recuperar el pulso. Por eso las administraciones de lotería confían en que 2022 sea un buen año. Y aunque la remontada final en las ventas no es fácil porque, tras la pandemia, la inflación y la inestabilidad económica puede perjudicar la caja, esperan que las ventas sean mejores. Y es que solo en 2020, cayeron en La Rioja un 11,72%, un porcentaje similar a la media nacional, debido a la situación económica y social. En total, se vendieron más de 24,1 millones de euros en la comunidad y cada riojano se gastó 76 euros en décimos. Llegar a los niveles de los años prepandemia es una buena meta porque en los siguientes años las ventas se resintieron: en 2020 cada riojano se gastó de media 76,20 euros; y en 2021 el gasto fue de 77,93 euros.
La Rioja ha resultado agraciada con importantes premios en varias ocasiones. Hace 20 años, el Premio Gordo de la lotería de Navidad regó Calahorra con 138 millones de euros. Y el año pasado, el sorteo de El Niño cayó en Logroño. El 41665 fue vendido íntegramente en la capital riojana y fue muy repartido ya que además, de venderse en una administración de lotería, se dispensó en el bar La Trompeta.