Autol trata de recuperar la calma tras el susto que la localidad riojabajeña sufrió la noche del viernes, al deslizarse una ladera en el barrio de bodegas, que provocó daños en algunas viviendas y el hundimiento de varios calados. La buena noticia era que, tras ese corrimiento, el terreno permanecía estable este domingo.

Así lo certificó un equipo de geólogos e ingenieros que supervisó ayer la zona. De hecho, si no hay nuevos movimientos, los vecinos de 7 de las 9 viviendas desalojadas tras el suceso podrían regresar en  los próximos días a sus casas, explicó a El Día de La Rioja la alcaldesa, Catalina Bastida. De las otras 2 casas, una sufrió daños por el deslizamiento de la ladera y la otra, que se encuentra en la parte inferior del cerro, tiene algunas grietas en una terraza trasera, pero la estructura de la casa está intacta. Las 7 restantes fueron desalojadas por precaución, debido a su cercanía a la zona, pero no han tenido que lamentar desperfectos. El suceso no ha provocado daño alguno a las personas.

 La alcaldesa precisó que de momento las viviendas no tienen servicio de agua, ya que la red de abastecimiento está cerca de la zona del movimiento de tierras, y añadió que los técnicos siguen recabando datos para emitir informes sobre lo que procede hacer. La más afectada es una vivienda que se encuentra en lo alto del cerro Santiago, que presenta grietas y desprendimientos en su estructura. 

La alcaldesa indicó que el hecho de que este domingo no lloviese es una buena noticia. También indicó que se han mantenido reuniones con los vecinos para mantenerles informados. El sábado visitó la zona la presidenta regional, Concha Andreu.

Bastida recordó que hace en torno a una década hubo en el pueblo otro movimiento del terreno y hace 7 años fue preciso reparar parte de una calle por el mismo motivo.