Fundación Artemisan ha puesto en marcha el proyecto 'Framework: potenciando la biodiversidad' con el propósito de desarrollar un nuevo método de agricultura alternativa denominada 'Agricultura sensible a la biodiversidad' y que promueve los servicios ecosistémicos combinando la mitigación de los problemas agrícolas y la conservación de la biodiversidad. Artemisan participa en este proyecto con uno de los once estudios pilotos que se van a desarrollar en Europa y que, en el caso de España, tendrá lugar en el municipio de Aguilar de la Frontera (Córdoba), con un plan previsto a cinco años.
Cada estudio piloto, explica la fundación, se utilizará para fomentar un cambio en la región mediante la implantación de prácticas agrícolas que servirán como ejemplo a otros agricultores y así buscar una transformación en el sistema de producción de toda Europa. Por el momento, el proyecto ya ha formado al grupo de agricultores avanzados que actuarán para mejorar el medio agrícola y favorecer la biodiversidad, decidiendo «cómo y cuándo actuar», pero siempre apoyados por la Fundación Artemisan, que será la responsable de controlar las actuaciones así como de supervisar las actividades de gestión de la biodiversidad.
Las zonas de actuación engloban a una superficie de más de 350 hectáreas correspondientes a fincas experimentales, principalmente de olivar y alguna de viñedo. Además, el proyecto cuenta con una zona de similares características pero en ella no se realizarán actuaciones para que sirva para comparar y poder observar la evolución de las poblaciones de distintas especies. Durante el mes de octubre y lo que va de noviembre, ya se han tomado los primeros datos para monitorizar la evolución de distintas especies animales en ambas zonas y se están planificando las actuaciones a desarrollar en los terrenos agrícolas, que estarán principalmente centradas en las coberturas vegetales.