Ficha técnica:

Ciudad de Logroño (19+15): Jorge Pérez (p), Ángel Jesús Rivero (4), Agustín Casado (6,2p), Álex Rubiño (4), Antonio Serradilla (6), David Cadarso (3), Oleg Kisselev, Mario Dorado (1), Ismael El Korchi (3), Mamadou Lamine Diocou, AliaksandrMarkelau, Javier Rodríguez (1), Tomás Moreira (6), Leo Almeida (0), Eduardo Ortiz y Leo Tercariol (p)

Benidorm (16+15): Roberto Rodríguez (p), Pablo Vainstein (1), Iker Serrano (7), José Oliver (1), James Lewis (7), Iván Rodríguez (2), Ivan Nik?evi? (2), Santiago Barceló, Vicente Benito, Jules José Lignieres (2), Carlos Grau, José María Martín (p), Juan Carlos Sempere, Eduardo Calle (2), Ignacio Valles (7,4p)

Árbitros: José Carlos Friera Cavada - Jesús Álvarez Menéndez. Excluyeron a los jugadores del Ciudad de Logroño, Oleg Kisselev, Antonio Serradilla, Mario Dorado, Agustín Casado; y del BM Benidorm, José Oliver, Iván Rodríguez, James Lewis, Carlos Grau. Expulsaron por tarjeta roja al visitante, José Oliver.

Parciales: 2-3, 5-6, 9-8, 15-10, 16-14, 19-16 (descanso) 19-17, 22-19, 24-23, 27-25, 30-26 y 34-31 (final)

Incidencias: Partido de la liga Sacyr Asobal de la 28º jornada de liga en el Palacio de los Deportes de La Rioja ante unos 500 aficionados

 El Ciudad de Logroño se ha impuesto al Benidorm por 34-31 en un partido igualado en el que el conjunto riojano fue de menos a más y en los minutos finales puso una marcha más que su rival y le superó gracias a una gran defensa, con la que se acerca a su objetivo de meterse en los puestos europeos.

El Benidorm empezó el partido con una ofensiva de siete jugadores, usando la figura del portero-jugador, lo que le hizo superar a la defensa riojana con facilidad en los primeros cinco minutos del encuentro, poniendo 2-4 arriba en el marcador.

Así, el Ciudad de Logroño fue a remolque del conjunto rival, pero nunca dejándole marcharse en el electrónico, sobre todo por el buen hacer de Agustín Casado, Ángel Rivero y Serradilla.

Poco a poco los pupilos de Miguel Ángel Velasco fueron carburando y encontrándose más cómodos sobre la pista, y en el minuto 10 de partido, Agustín Casado puso las tablas en el marcador (6-6), después de una buena parada de Jorge Pérez.

El Benidorm siguió usando siete jugadores en sus jugadas de ataque, y lo que al principio del encuentro le valió para tomar la delantera, esta vez, fue en su contra porque el cuadro riojano estuvo más férreo en defensa y más rápido al contraataque, además de que el portero, Jorge Pérez, realizo varias paradas de mérito.

Esta combinación generó que el conjunto logroñés abriera una importante brecha en el marcador, poniendo el 15-10 en el marcador, con goles de Antonio Serradilla y Tomás Moreira, entre otros.

Por ello el Benidorm se vio obligado a reaccionar e hizo un poco de daño al conjunto riojano, con buenas actuaciones de Iker Serrano y James Lewis, este último el mejor de su equipo hasta el momento, así que el marcador se redujo hasta los dos goles de diferencia (16-14).

El equipo local no se amedrentó ante esta mejoría rival, ya que volvió a recuperar el control del juego, y se fue al intermedio tres arriba en el electrónico (19-16).

Tras el descanso, el marcador no se movió hasta pasados los primeros cuatros minutos, debido al fallo en las ataques, pero también a las buenas intervenciones de ambos porteros, aun así, el BM Benidorm fue el que logró romper esta mala racha, gracias al tanto de Eduardo Calle.

Este gol pareció activar al Ciudad de Logroño, en especial a David Cadarso, que anotó los dos primeros tantos del conjunto local, ampliando la distancia a cuatro goles (21-17).

El cuadro rival, aun así, estuvo más sólido sobre la pista en los siguientes minutos, y empezó a recortar la distancia, con los goles de Iván Rodríguez y Jules José Lignieres, lo que hizo que se colocara a dos tantos, hecho que obligó a Miguel Ángel Velasco a pedir tiempo muerto.

Este mini descanso no sirvió de mucho, ya que el Benidorm igualó el encuentro a 23 goles, con un disparo desde los siete metros, a falta de 15 minutos para el final del encuentro.

Pero este empate sí que hizo reaccionar a los pupilos de Miguel Ángel Velasco, quienes volvieron a coger las riendas del partido gracias a un "inmenso" Antonio Serradilla en defensa, y a la potencia de Ángel Rivero en ataque, por lo que el Logroño volvió a tomar la delantera (26-24).

Finalmente, el conjunto riojano supo controlar los minutos restantes del encuentro, e incluso amplió la distancia en el electrónico, consiguiendo un resultado final de 34-31, una victoria que le acerca al Benidorm en la clasificación, y le mantiene en la pelea por los puestos europeos.