Dos menores detenidos por la brutal paliza a dos octogenarios

R.M.
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La operación habría propiciado más detenciones, aunque la Guardia Civil no lo confirma

La vivienda donde ocurrieron los hechos permanecía ayer cerrada a cal y canto - Foto: Óscar Solorzano

La Guardia Civil ha procedido estos días a la detención de al menos dos menores de edad relacionados con el robo y la brutal paliza a dos personas octogenarias, un hombre y una mujer, en el municipio riojano de Entrena a principios del pasado mes de octubre. Según las fuentes consultadas por El Día de La Rioja, ambos habrían ingresado ya en el centro de menores, sin que hasta el momento hayan trascendido más datos.

La Guardia Civil no confirmó ayer las detenciones ni el desarrollo de una investigación que no descarta nuevos arrestos. Los hechos ocurrieron el sábado 1 de octubre pasadas las 11 horas, cuando uno de los ocupantes de la vivienda situada en el número 7 de la carretera de Lardero, salió a hacer un recado. En ese momento, sintió que alguien le seguía y al volverse, el sospechoso disimulaba.

Hospitalizados. Tras realizar el recado y regresar a su casa, el atracador le empujó de forma violenta para introducirlo en la vivienda de dos plantas en la que residían ambos bajo una relación familiar de cuñados. Tras arrastrarlo hasta el segundo piso, el atracador les amordazó al tiempo que les propinaba una brutal paliza por la que tuvieron que acudir al hospital San Pedro, donde permanecieron ingresados recuperándose de diferentes heridas y fracturas.

El individuo les mantuvo retenidos alrededor de tres horas hasta que varios vecinos de la localidad riojana escucharon gritos procedentes de la citada vivienda y, percatándose de lo que sucedía, alertaron a la Guardia Civil. El atracador huyó por los campos de cultivo próximos a la vivienda de la carretera de Lardero antes de que las dos patrullas de la Benemérita se personaran en el lugar de los hechos. Poco o nada se ha sabido de los dos ocupantes de una vivienda que en la tarde de ayer mantenía las persianas de ventanas y balcones totalmente cerradas y en cuyo bajo se ubican las oficinas de los almacenes de fruta, hasta hace poco, propiedad de la familia.