El Seris amplía los métodos de control de la diabetes

El Día
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Coincidiendo con el Día de la Diabetes el Gobierno de La Rioja ha anunciado la ampliación de los métodos de control de la diabetes con la implantación del sistema de infusión automática de insulina, conocido como el "páncreas artificial"

La implantación del sistema de infusión automática de insulina amplía las formas de control de la diabetes. - Foto: Servicio Riojano de Salud

El Hospital Universitario San Pedro, a través de los servicios de Endocrinología y de Pediatría, ya ha comenzado a implantar el sistema de infusión automática de insulina para el control de glucemia, más conocido como "páncreas artificial". Desde agosto de 2021 se benefician de este novedoso sistema de control diabético 17 adultos y 11 niños con diabetes mellitus tipo 1. El Gobierno de La Rioja ha incluido esta prestación en la cartera de servicios complementaria del Servicio Riojano de Salud, y la visibiliza hoy, Día Mundial de la Diabetes.

El 'páncreas artificial' es un sistema electromecánico, capaz de infundir insulina de forma automática y dependiente de la glucosa, emulando así la funcionalidad de las células productoras de insulina, con el objetivo de mantener la glucemia en rangos normales y estables.

El páncreas artificial, por tanto, no es en sí mismo un dispositivo físico único, señalan desde el Gobierno de La Rioja, sino dos dispositivos independientes, el infusor de insulina y el sensor de glucosa, comunicados entre sí e interrelacionados mediante un algoritmo de control. Este algoritmo es un conjunto de reglas matemáticas que permiten determinar la cantidad de insulina que debe administrar el infusor de insulina, en cada momento, en respuesta a los datos de glucosa intersticial detectados por el sensor. Se produce así una automatización importante en la dosificación de insulina. A pesar de estos avances, la automatización es todavía parcial, requiriendo todavía intervención del paciente en momentos clave del control de glucosa. Sigue siendo necesario el contaje de hidratos de carbono e informar al sistema sobre la ingesta, así como realizar ajustes preventivos antes del ejercicio.

Estos sistemas han demostrado de forma consistente mejorar el tiempo con niveles normales y estables de glucemia, sobre todo durante la noche y una reducción importante del número y duración de las hipoglucemias (o bajadas de glucosa), lo que se traduce en mejora de su calidad de vida y establece un cambio de paradigma, un «antes y un después», en el control de su diabetes.

 

SISTEMAS DE ASA CERRADA HÍBRIDA, COMÚNMENTE CONOCIDOS COMO PÁNCREAS ARTIFICIAL 

La tecnología en diabetes ha venido a intentar mejorar la gestión de la enfermedad a través de avances en la medición de glucosa y de la administración de insulina de una forma más automatizada. Pero para que estos avances supongan un claro beneficio en el control metabólico, con mejores resultados en salud, y una mejora en la calidad de vida es imprescindible un elevado grado de motivación e implicación por parte del paciente, participando en la educación diabetológica y con un adecuado cumplimiento a las recomendaciones de su equipo de diabetes.

En estos dos últimos años, el Sistema Público de La Rioja ha favorecido la incorporación de las últimas tecnologías para que los pacientes diabéticos de La Rioja dispongan de las últimas novedades para el mejor control de su enfermedad, incluyéndolas en la cartera de servicios del SERIS.

 

SENSORES DE GLUCOSA

El control glucémico de la diabetes, y sobre todo de la diabetes tipo 1 (DM1) es especialmente complejo, ya que en la regulación de la glucemia intervienen múltiples factores. Para un adecuado control metabólico es necesario conocer los niveles de glucosa en sangre y utilizar esta información para realizar modificaciones en el tratamiento insulínico y mantener la glucemia en rango.

Los glucómetros (aparatos para medir la glucemia capilar o en sangre con punción digital) se han ido perfeccionando en los últimos años, de forma que cada día son más rápidos, precisos y necesitan menor cantidad de sangre.

En los últimos años se han desarrollado los sistemas de monitorización continua de glucosa (MCG), conocidos como sensores de glucosa, que miden la glucosa de forma continua en el tejido intersticial y no en la sangre. Estos sensores, se insertan en el tejido subcutáneo y dan información constante de los niveles de glucosa. Además de evitar la incomodidad del pinchazo, han demostrado mejorar el control metabólico y disminuir las temidas hipoglucemias, así como mejoras en la calidad de vida.

En los últimos cuatro años se ha realizado la financiación de estos dispositivos a todas las personas de La Rioja con diabetes tipo 1 y otros tipos de diabetes que precisan pautas complejas de insulina. Desde hace 6 meses, el Gobierno de La Rioja, a través del SERIS, ha iniciado también la financiación a las personas con diabetes tipo 2 que precisan de múltiples dosis de insulina, siendo la cuarta comunidad autónoma que realiza esta cobertura. Desde el servicio de Endocrino se ha realizado formación especializada en el manejo de los sensores y se realiza seguimiento continuado en consultas.

 

AUTOMATIZACIÓN DE LA ADMINISTRACIÓN DE INSULINA

En la DM1 es necesaria un tratamiento intensivo de insulina para normalizar los niveles de glucosa en la sangre. Tradicionalmente se precisa la administración de múltiples dosis de insulina subcutánea (de 4 a 5 inyecciones al día).

En determinadas situaciones puede recomendarse el uso de bombas de insulina o infusores subcutáneos continuos de insulina (ISCI) que administran pequeñas cantidades de insulina de acción rápida, de forma lenta y continua, a través de un catéter implantado en el tejido subcutáneo. Son sistemas llamados de «asa abierta», no automatizados, en que la cantidad de insulina infundida está programada a priori; es decir, es el propio paciente quien debe decidir, o no, modificar dicha infusión de insulina, en tiempo, real, en función de los datos de glucosa.

Por ello la MCG o sensores han supuesto un gran avance, porque dan información en cada momento de los niveles de glucosa, que permiten mejorar las decisiones y acciones para mantener su glucemia en un rango óptimo.

Pero la tecnología en diabetes en los últimos años ha dado un paso más integrando estos dos dispositivos: un infusor de insulina y un sensor de glucosa, a través de un algoritmo, como ya se ha señalado, que adapta la infusión de insulina a las cifras de glucemia, permitiendo un mejor control metabólico y una disminución de la carga de enfermedad para los pacientes.