El debate Andreu- Garrido anticipa la campaña autonómica

Feli Agustín
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El popular reconoce la demora en elegir líder «para no equivocarnos, como pasó con usted»;la presidenta destaca que el cambio en La Rioja lo representa el PSOE

El portavoz popular, Jesús Ángel Garrido, durante su intervención en el Debate en el Estado de la Región, contemplado por Concha Andreu. - Foto: Ingrid

Respaldado en su contenido y actitud por la innegable victoria popular en las elecciones autonómicas andaluzas, al portavoz del PP, Jesús Ángel Garrido, no le hizo falta que su formación haya elegido a quien debe liderar el partido -ni parece posible que lo vaya a hacer antes de septiembre- para plantear su intervención en el Debate del Estado de la Región como el primer acto electoral de la campaña de 2023.

«Desde un ilusionante y pujante grupo popular, ya le avanzamos que este será su último debate», le espetó a Andreu, y «usando la terminología sanchista», invitó a la presidenta que  a que «deje de estorbar, estorbar y estorbar».

Le indicó a la presidenta que «ha desaprovechado» su oportunidad frente al Gobierno, al contrario de lo que han hecho otros líderes populares que se han enfrentado a las urnas -Ayuso, Feijóo, Mañueco y Moreno-, que han reforzado su liderazgo, mientras que la riojana, según Garrido, ha fracasado. «Ellos han generado ilusión y esperanza y usted desencanto y descontento;  a usted le silban y a ellos les aplauden», argumentó el diputado popular, que le acusó de «estar maniatada» a los intereses de Pedro Sánchez y estar sometida a los designios de la extrema izquierda y el populismo «por lo que ha pagado un precio reputacional inimaginable».

La presidenta, en su turno de respuesta, trató de rebajar la euforia de la que hizo gala el popular y puntualizó que en una analogía de los nuevos tiempos tras el triunfo popular en Andalucía, «el cambio en La Rioja» lo supone el PSOE.

Garrido, crecido  con los vientos que soplan desde el sur, quitó importancia a la ausencia de liderazgo en el PP riojano -que Andreu le recordó- y avanzó que se tomarán el tiempo que sea necesario porque, aseguró, «no nos vamos a equivocar, como los socialistas hicieron con usted». 

En el núcleo de su intervención, evaluó la que ha sido en su opinión la gestión del tripartito, que contrapuso con algunas propuestas.  Así calificó de «estafa» que gaste cuatro millones más que el anterior gobierno popular en su estructura política, dinero derrochado «en chiringuitos, en su corte y en la panda de la tránsfuga Romero [la consejera elegida por Podemos, formación a la que ya no pertenece}. «Recuperaremos espacios de libertad que nos han arrebatado», afirmó Garrido,  que se centró en la área de educación, y prometió defender «la libertad educativa para amparar la capacidad de los centros de diferenciarse y el derecho de las familias a elegir el colegio». 

 Propondrá una ley de control del gasto público para racionalizar la actividad del propio Gobierno y de todo el sector público, simplificar la burocracia administrativa y reducir cargas impositivas. Al respecto, criticó «la voracidad»  del actual sistema tributario, que ha permitido al Gobierno recaudar en el primer cuatrimestre 53 millones, 166 euros más por persona en impuestos. «Es el crecimiento más alto los últimos 14 años, y el PIB no ha recuperado el nivel prepandemia», señaló Garrido, que se comprometió a potenciar la economía del conocimiento y a apoyar las empresas del sector TIC.

Mostró su «preocupación mayúscula» por la gestión de los fondos europeos y exigió una auditoría ante su «nula ejecución», que le hace poner en duda el crecimiento estimado del 7% del PIB que, recordó, el presidente del Colegio de Economistas ha cifrado en el 3,7%.

Garrido discutió algunos de los datos económicos con los que la presidenta ha pertrechado su mensaje a lo largo de todo el Debate y atacó una de las joyas de la corona:la creación de empleo indefinido. «El mercado laboral está dopado por la contratación pública», afirmó el portavoz popular, que criticó que los fijos discontinuos no computan como parados cuando no trabajan. 

«Según la EPA, La Rioja fue la única comunidad en la que creció el paro y el 65% de los nuevos contratos indefinidos son precarios», afirmó el diputado del PP;que recriminó a Andreu el «error histórico» de «someterse» al PNV  «que aspira a romper» la Denominación, cuya defensa será su prioridad. A pesar es este alud de críticas, invitó a Andreu a pactar una ley de cuidados paliativos y dos acuerdos de región, por la natalidad y recuperar la unidad de acción en «históricas demandas» de infraestructuras, porque La Rioja «no merece un corredor de tercera».

La defensa. Al respecto, Andreu le respondió que hay que aprovechar las actuales vías férreas -a 200-220 kilómetros por hora- y compatibilizar el transporte de viajeros y mercancías, a la vez que se respeta el rico patrimonio piasajístico riojano. Fue defendiéndose de otras de  las críticas expresadas por el popular y desechó el supuesto derroche del que le  acusó Garrido. «El Gobierno de Ceniceros fue el más ineficaz» y llevó a la Comunidad «al precipicio», dijo Andreu, que, al hilo de esta reflexión, señaló que «no importa que fuera más barato, fue inútil para la población riojana». «Le voy a contar lo que recibí con el traspaso de poderes: recibí un Via-t», añadió.

 Respecto a la escasa ejecución de fondos Next Generation, resaltó que ya han llegado a La Rioja 188 millones y se manifestó dispuesta a escuchar cualquier propuesta, pero apeló al PP a no inventar la realidad y no hacer un relato «avinagrado y cínico». «Una mentira mil veces repetida no se convierte en una verdad», afirmó la jefa del Ejecutivo, que defendió la «solvencia y honradez» con la que su Gobierno está gestionando esta comunidad para dar solución a «los problemas reales» desde un partido que «representa cambio, ilusión y solvencia». «Recuperaremos la autoestima, ilusión y serenidad, con  soluciones reales, sensatas, rigurosas y ajustadas a los tiempos que se nos acercan», afirmó  Garrido,  que cerró su intervención con tono de despedida a Andreu . «No nos merecemos los 11 meses de su agonía política y si algo ha quedado claro es que se encuentra más cómoda haciendo oposición a la alternativa que presentando propuestas, que han sido escasas y de poca entidad», finalizó.