El efecto de la despoblación en La Rioja sigue haciéndose notar en la última actualización del padrón municipal que el Instituto Nacional de Estadística datado el 1 de enero de 2022. Y una de sus consecuencias más inmediatas de cara a 2023 es la pérdida en el número de representantes políticos, concejales y ediles, en tres municipio riojanos. Así, Cañas, Grañón y Santurdejo adelgazan su corporación municipal en dos concejales cada uno, pasando de cinco ediles que tienen en la actualidad, a tres. Se trata de una foto fija que ilustra el momento población de cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas que se afrontarán en mayo de este mismo año.
Así, el municipio de Cañas contaba en 2019 con 102 habitantes lo que, según la La Ley Orgánica del Reglamento Electoral General (LOREG) le confería hasta cinco concejales. Sin embargo, según los actuales datos del padrón municipal, la localidad registra una vez finalizado 2022, 89 habitantes, lo que provoca un descenso a tres los concejales que representarán a los habitantes del municipio. Algo similar ocurre en Grañón. Este municipio de La Rioja Alta también perdió población durante la actual legislatura. En 2019 contaba con 254 habitantes y, en la actualidad, con 250. Esa pequeña variación poblacional- cuatro habitantes – es muy relevante porque le hace perder dos de los cinco concejales que han sustentado la representación popular en el ayuntamiento de la localidad. Por lo tanto, solo tres personas se convertirán en ediles tras los comicios municipales.
Otro de los pueblos riojanos que perderá concejales es Santurdejo porque adelgaza su nómina de ediles en 2, pasando de los 5 representantes que consiguió en las elecciones de 2019 a los 3 que les conferirán los 100 habitantes inscritos en el último padrón municipal.
La pérdida de representantes municipales es una realidad patente en cada cita electoral. De hecho, en 2019, hasta ocho municipios vieron descender el número de ediles, fueron: Préjano, Bañares, Matute, Ortigosa de Cameros, Ribabrecha, Rodezno, Santa Coloma y Soto en Cameros. En total se quedaron por el camino unos 16 representantes municipales.
Unos pierden y otros ganan. La otra cara de la moneda la ponen los municipios que consiguen población y ésta, por tanto, les permiten aumenta su número de concejales. Según los datos del censo a 1 de enero de 2022, Ribafrecha, municipio que había perdido dos concejales en los anteriores comicios, en 2023 sería capaz de recuperarlos. Este municipio de La Rioja pasó en 2019 a tener menos de 1.000 habitantes, 967, por lo que vio descender en dos su lista de concejales, siete en total. Sin embargo, si para cita electoral de este año su población no variara de los 1.031 vecinos, podrá recuperarlos y volver a contar con 9 ediles. Otro de los municipios que gana concejales con respecto a 2019 es San Vicente de la Sonsierra que contará con dos más hasta un total de siete ya que ha visto crecer su padrón municipal hasta los 1.031 habitantes.