El uso de drones en agricultura permite aumentar la rentabilidad de las parcelas, al detectar las zonas que requieren un mayor uso de fertilizantes o productos fitosanitarios y también ayuda a predecir plagas y enfermedades en los cultivos.
Estas son algunas utilidades desarrolladas por la empresa riojana Spectralgeo, según ha detallado a Efe su director general, Carlos Tarragona, quien ha intervenido este sábado en el I Congreso Internacional de Drones "La Rioja Drone Future", que se celebra en Logroño hasta el domingo.
Los drones consiguen "una información que no es capaz de captar el ojo humano", ha subrayado, y además, pueden hacer mediciones que permiten a los agricultores aumentar la rentabilidad de sus parcelas.
Así, mediante la teledetección, se pueden apreciar las diferencias que existen dentro de una misma parcela para tratar esa parte del cultivo "de forma diferenciada", ha explicado.
De este modo, se pueden ahorrar gastos en los insumos, como agua de riego, fitosanitarios y fertilizantes, gracias a estas técnicas de "agricultura de precisión".
Además de aumentar la rentabilidad económica del agricultor, se utilizan esos productos solo dónde realmente se necesita, lo que permite incrementar la producción agraria.
Esta empresa ya aplica estas técnicas con drones en unas 26.000 parcelas con una superficie total de 7.500 hectáreas, ha indicado, principalmente en terrenos grandes de cooperativas, bodegas y grandes asociaciones agroalimentarias.
Spectralgeo proporciona a sus clientes información periódica de la evolución de sus cultivos y también predicciones realizadas por Inteligencia Artificial, "para que puedan conocer con meses de antelación cómo se desarrollan y actuar en consecuencia", ha indicado.
En este sentido, pueden llegar a predecir qué producción se va a recoger, la calidad de su cultivo, cuándo puede ser la fecha óptima de recolección y si se puede producir alguna plaga o enfermedad en las plantas.
Para ello, Tarragona ha detallado que se han diseñado unos algoritmos que permiten detectar de forma temprana una plaga, antes de que se muestren los síntomas y esté afectado gran parte del cultivo, para poder realizar tratamientos "muy localizados".
Aparte de ahorrar en gasto en productos fitosanitarios, al actuar solo en el punto de la parcela que lo necesita, ha asegurado que esta técnica es "más respetuosa con el medio ambiente".
Ha reconocido que en España aún no se utilizan demasiado en la agricultura estas herramientas de teledetección porque hay muchas parcelas pequeñas y "el agro no está muy tecnificado", pero han comenzado a aumentar los cultivos monitorizados.
Por otro lado, esta empresa también trabaja con drones en proyectos medioambientales, como el europeo "Open2Preserve", en el que han generado un inventario para estudiar las zonas de alta montaña y evaluar el riesgo de incendio forestal.
Para ello, cuentan con herramientas de Inteligencia Artificial que son capaces de identificar el tipo de arbusto o matorral, calcular el fitovolumen de cada especie vegetal y estudiar el ganado que pasta en cada zona.
Los drones también se pueden emplear para aumentar la eficiencia de los procesos industriales, un proyecto que ha desarrollado esta compañía a través de su sistema "VARPEL", con el que ha logrado mejorar la optimización de las plantas de selección de envases en un 20 por ciento.
En este caso, se calculan el volumen y densidad de los residuos mediante la fotogrametría avanzada, lo que permite agilizar los procesos de reciclaje.
Esta empresa, ubicada en Logroño, se fundó en 2016 y cuenta con un equipo multidisciplinar formado por once trabajadores, que colaboran en 23 proyectos de investigación con diversas universidades y centros tecnológicos.