Ficha técnica:
Real Madrid: Misa; Robles (Samara, 89), Ivana, Peter, Corredera; Cardona (Ubogagu, 78), Kaci, Oroz, Teresa Abilleira (Daysa, 69), Jakobsson (Aslani, 69); y Jessica Martínez.
EDF Logroño: Pamela Tajonar; Caracas, Laia Ballesté, Marta Cazalla, Lorena Valderas; Judith Luzuriaga (Cynthia, 76), Linda Nyman (Ida Guehai, 58), Chini Pizarro (Valeria Pascuet, 76), Anita (Julie Tavlo, 69); Rebecca Elloh (Grace Asantewaa, 58) y Jade Boho.
Árbitra: Cebollada López(colegio aragonés). Amonestó a Anita, Judith Luzuriaga y Daniela Caracas.
Goles: 1-0, M. 41: Marta Cardona; 2-0, M. 86: Abogagu.
Incidencias: encuentro correspondiente a la jornada 16 celebrado en Valdebebas.
Un EDF Logroño sin ideas ofensivas cayó en Valdebebas en el primero de sus dos encuentros semanales. Las riojanas, carentes de peligro, mejoraron sus prestaciones defensivas pero fueron incapaces de intimidar al tercer clasificado.
El Madrid aprovechó su primer tiro a puerta para tumbar a un EDF Logroño que, en la segunda mitad, careció de pegada. La sentencia de Abogagu llegó en el 86 pero hasta ese instante las logroñesas fueron incapaces de probar la solidez de Misa. El descenso acecha y el domingo visita Las Gaunas un Madrid CFF en racha. Con la imagen ofrecida ayer no da para sorprender al quinto clasificado.
Tras una primera contra logroñesa, el Madrid monopolizó el juego, con Jessica Martínez insidiando el área local. La paraguaya, en el minuto 5, intentó empujar a la red una buena asistencia de Marta Cardona. No tocó pero su acción despistó a Pamela Tajonar. El balón entró pero la colegiada decretó fuera de juego. Fue un aviso. Quedó constatado que con esta actitud era cuestión de tiempo que las riojanas acabasen doblegando la rodilla.
El dominio blanco fue total aunque sin intimidar a Pamela Tajonar que vivó un cuarto de hora plácido pese a que el balón merodeó continuamente el área riojana. El EDF Logroño, para sacudirse el dominio, tiró la presión bien arriba lo que dificultó la salida local. Aunque cuando lograron sacudirse la presión, las de Aznar tenían el camino expedito. Por fortuna, cuando lo consiguieron (Cardona, Teresa y Corredera desde la distancia), les faltó colmillo para poner en apuros a la mexicana.
En cualquier caso, y pese al monopolio merengue, el EDF Logroño se acercaba el descanso sin percances. El Madrid proponía, el EDF contenía, aunque Judith con un centrochut envenenado puso en apuros a Misa.
Esta predisposición alcanzaba para arañar un punto, magro consuelo a corto plazo, buen resultado en una óptica largoplacista. La consigna de portería a cero se aventuraba como una premisa esencial para puntuar en Valdebebas. Sin embargo, en una acción aislada, el Madrid decantó a su favor el marcador en su primer remate a puerta. Jacobsson centró para Jessica Martínez cuyoremate fue desviado por la zaga con la fatalidad de que el balón se quedó franco para Marta Cardona que, sin oposición, fusiló a Tajonar.
El EDF tenía cuarenta y cinco minutos para remediar la situación. Con defender no bastaba. Las riojanas dieron un paso adelante aunque Jade Boho seguía sin encontrar socias.
A la hora de juego, Moncayo se la jugó acompañándola con Ida Guehai y Grace Asantewaa, con más llegada que Nyman. El dibujo se mantuvo pero había que arriesgar. En la primera transición blanca, Kaci estuvo a punto de sentenciar. No lo hizo y las logroñesas tenían media hora para soñar.
Sin embargo, la falta de claridad volvió a penalizar a las riojanas, incapaces de prodigarse en ataque. De hecho, un disparo lejano de Ida Guehai fue el único conato ofensivo visitante. La costamarfileña no encontró portería.
Las riojanas tenían diez minutos para buscar la igualada pero ni con la entrada de Cynthia lograron encontrar a Jade, harta de tirar carreras carentes de complicidad. El partido avanzaba hacía su conclusión. La derrota era cuestión de minutos. Por si acaso, la nigeriana Ubogagu sentenció infiltrándose entre las centrales y batiendo con suavidad a Pamela Tajonar.
Fue el epílogo de un triste encuentro. El EDF da un nuevo paso hacia el abismo. Con lo ofrecido en Valdebebas da para poco.