La percepción de control, clave para superar un trauma

Europa Press
-

La profesora del Máster en Neuropsicología Clínica de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Raquel Balmaseda habla del miedo o el estrés postraumático en las guerras

Varias personas refugiadas - Foto: Cézaro de Luca Europa Press

La profesora del Máster en Neuropsicología Clínica de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Raquel Balmaseda, ha señalado cómo la percepción de control de las cosas cotidianas es clave para superar una situación traumática como una guerra.

En una entrevista a Europa Press, Balmaseda ha empezado por relatar cómo el miedo es una emoción básica, y primitiva, cuya función es la supervivencia.

Cuando nos sucede cualquier hecho se nos graba en la memoria tanto la información del contexto en el que sucedió como las emociones que sentimos y, en caso de que sea vivido como traumático, se graba de forma muy vívida el aspecto emocional, mientras el escenario en el que sucede permanece en menor medida.

Las síntomas de que existe un estrés postraumático son revivir una y otra vez lo sucedido, evitar personas o situaciones que lo recuerdan, la hipervigilancia y la falta de atención y memoria, así como la ansiedad o depresión.

En este sentido, ha visto muy relevante que los estudios han mostrado cómo la psicoterapia hace que desaparezca el estrés y se da la vuelta al estado en el que se había activado el cerebro.

En un momento en el que a nuestro alrededor van a convivir personas que han vivido la guerra y han tenido que huir de su pais, Balmaseda ha señalado cómo en los niños, cuyo cerebro está en desarrollo, las consecuencias, muchas veces, se ven a largo plazo.

"Pueden manifestarse alteraciones del comportamiento a largo plazo, que al principio parezca que no ocurre nada no significa que no les esté pasando nada", ha explicado.

La profesora del Máster en Neuropsicología Clínica ha destacado cómo perder la percepción de control es "lo que peor lleva el cerebro", por lo que "poder controlar las cosas que están en nuestra mano, sin pensar a largo plazo" permite "aliviar" las sensaciones negativas.

"La percepción del control está muy estudiada", ha dicho al tiempo que ha subrayado la importancia de sentir que se puede controlar la situación, aunque sea algo imaginario, para poder reducir el nivel de estrés.

De este modo, ha contado cómo se está viendo en las entrevistas a las personas que están viviendo la invasión de Rusia a Ucrania cómo destacan lo importante que es para ellas el día a día, centrarse en sobrevivir cada día, en conseguir comida cada día "sin pensar en algo mucho más allá".

El humor y el optimismo también tienen un efecto saludable y, por eso, se están viendo imágenes de ucranianos haciendo cosas como tocar el piano o grabarse bailando. Junto a esto, el ejercicio físico "oxigena y mejora las funciones" del cerebro.

Por último, la meditación o las creencias religiosas, así como técnicas de flexibilidad cognitiva suponen un alivio.