Nadie podría llegar a pensar en pleno siglo XXI que una sociedad, por muy ultratradicional que fuese, acepte y asuma un asesinato a algunos de sus miembros por el mero hecho de haber sido afrentada. Pues eso es lo que sucede aún en lugares remotos del sur de Asia y eso es precisamente lo que les ha pasado a dos hermanas paquistaníes de 20 y 24 años, Aneesa Abbas y Arooj Abbas, afincadas en España.
Las jóvenes Aneesa y Arooj.
Son los mal conocidos como crímenes de honor, asesinatos que suelen implicar a varones de una familia que vengan lo que consideran una ofensa contra ese hogar, casta o linaje.
Los hechos tuvieron lugar cuando las dos jóvenes regresaron a su lugar de nacimiento, en Gujrat, una localidad en el este de Pakistán, para pedir el divorcio a sus primos, con los que se habían casado por la fuerza hace más de un año. De hecho, las dos mujeres se habían negado a que sus maridos les acompañaran de regreso a Europa antes del doble crimen.
Según la investigación, las dos chicas «fueron estranguladas y recibieron un disparo mientras dormían», en un crimen «por honor», confirmó la Policía local a través de un portavoz. De momento, los agentes arrestaron a seis de los presuntos asesinos.
«Las hermanas querían divorciarse tras el matrimonio concertado y ambas deseaban casarse con otros», concluyó el agente, quien agregó que todavía hay tres sospechosos sin detener, y el padre de las jóvenes «todavía está en España». La madre se negó a interponer una denuncia, algo habitual en este tipo de crímenes.
Aunque en un principio se creyó que las dos jóvenes tenían nacionalidad española, fuentes de la embajada de España en Islamabad precisaron que las hermanas son paquistaníes con permiso de residencia en España, donde estaban domiciliadas en Cataluña.
El Ayuntamiento de Terrassa, localidad donde vivían, informó que todavía no han recibido la confirmación oficial de que son vecinas de la ciudad y que cuando llegue activarán el protocolo de duelo establecido en estos casos. Según fuentes de los Mossos, al menos una de las dos jóvenes asesinadas residía en Terrassa, mientras que la otra está por determinar.
Al no ser ciudadanas españolas, no se puede activar el servicio de asistencia consular de la Embajada, advirtieron. Además se trata de paquistaníes que se encuentran en su propio país, por lo que son las autoridades del país las que se ocupan del suceso.
Este tipo de casos, sin embargo, no son algo aislado y, según explicaron las mismas fuentes, en los últimos años la legación ha atendido varias peticiones de auxilio de ciudadanas nacionales de origen paquistaní a las que tenían secuestradas. En ocasiones llegaron incluso a llevar a cabo operaciones de rescate, en las que informaban primero a la mujer de que a cierta hora de la noche le esperaría un coche para trasladarla directamente a la embajada, donde luego recibía protección consular.
Declaración a los Mossos
Mientras, desde España, los Mossos d'Esquadra citaron a declarar a varios familiares de las dos hermanas paquistaníes residentes en Cataluña y asesinadas en su país de origen para determinar su grado de colaboración en el viaje de estas.
Fuentes próximas al caso explicaron que la Policía catalana está investigando los hechos y detallaron su interés en determinar si las obligaron a viajar allí o si las convencieron de ello.
En 2021 un total de 450 mujeres fueron asesinadas en estas circunstancias en Pakistán.