Cinco siglos de historia bien se merecen un rey

Feli Agustín
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El V Centenario del Sitio, el Camino de Santiago y el vino, los raíles sobre los que se ha transcurrido el devenir de Logroño, conforman la visita hoy de Felipe VI, que recorrerá a pie un tramo de Ruavieja

Los entonces príncipes saludan a Gorgorito en su visita para clausurar el XIII Congreso Estatal del Voluntariado en 2010. - Foto: Ingrid

España vivía entonces un momento convulso, muchas ciudades de Castilla se habían levantado contra el joven emperador, Carlos I, un extranjero que apenas conocía el idioma, pero reinaba sobre un territorio donde no se ponía le sol. Su gran enemigo, el francés Francisco I, aprovechó la revuelta comunera y, al mando del general Asparrot, el ejército galo cruza los Pirineos a mediados de mayo de 1521, con un avance rápido hasta Pamplona, que cae el 20 de mayo, prosiguiendo su recorrido hacia el sur.

El 25 de mayo los franceses cruzan el Ebro en Varea y acampan en Madre de Dios. Asparrot ordena bombardear la ciudad y descepar los viñedos, pero escribe a su rey quejándose de hambre y problemas de abastecimiento.

Entre la verdad y una leyenda profundamente arraigada, se cuenta que entre finales de mayo y el día 11 de junio, los logroñeses, que han decidido aguantar el asedio, se alimentaron gracias al pan que se cocía diariamente con el grano almacenado, a los peces que pescaban por la noche escapando al Ebro por una serie de túneles por debajo de la muralla y al vino que se elaboraba en sus bodegas.

 A la par, llega la noticia de que el Conde de Haro se dirige a la ciudad con sus tropas. Todo esto va haciendo minar la moral de los franceses que el 10 de junio levantan el campamento. Carlos I, como recompensa, otorga a la ciudad de Logroño beneficios fiscales, el título de muy noble y muy leal y que pueda lucir en su escudo tres flores de lis.

Cinco siglos después, el sucesor -aunque no por línea sanguínea- del emperador, Felipe VI, llegará hoy a Logroño para recordar la victoria de los logroñeses al asedio de las tropas francesas, unos acontecimientos que forjaron el destino de Logroño durante los siguientes tres siglos. La visita del Rey, que llegará acompañado por la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, comienza precisamente en la  plazuela Alonso de Salazar, situada en la calle Norte, junto a la iglesia de Santiago, donde la tradición ubica la celebración del Concejo Abierto en el que el pueblo de Logroño, a las órdenes de Pedro Vélez de Guevara, decidió resistir al invasor.

Será en este enclave, muy entroncado en la historia de la ciudad, donde el ‘sucesor’ de Vélez de Guevara, el alcalde, Pablo Hermoso de Mendoza, explique a Felipe VIalguno de los detalles del asedio y del valeroso comportamiento de sus antepasados. Después,  acompañado por la presidenta, Concha Andreu; la delegada del Gobierno, María Marrodán; y el presidente del Parlamento, Jesús García, su majestad recorrerá a pie un tramo del Camino de Santiago en la calle Ruavieja, punto de referencia para quienes peregrinan hacia Compostela, el otro gran hito de la historia de Logroño y que ha conformado su carácter de ciudad abierta.

Los espacios del vino. Hará una segunda parada en el  Espacio Lagares, en el que, entre los siglos XVIy XIX, se elaboraba el vino de los logroñeses, y que acoge desde este mes el nuevo punto de información turística del Ayuntamiento de Logroño; de hecho Felipe VI inaugurará este recurso, a la vez que visita parte de la exposición El Camino del Vino que, con carácter permanente, compartirá con el calado de San Gregorio.

Esta muestra está compuesta por 24 piezas, cedidas por el Museo Vivanco, entre las que figuran  prensas de banasta de hierro y madera; encorchadoras, garrafones, damajuanas, bombas, fuelles de trasiega, embudos, medidas de metal, cañas de trasiega y una azufrera, entre otras piezas de metal, cobre, barro o cesta.

Será, precisamente, el otro escenario de la exposición, el calado de San Gregorio, donde Felipe VI descubrirá una placa referida a su visita para trasladarse, a continuación, hasta la Plaza del Ayuntamiento. Saludará allí a la Corporación municipal para, a continuación, visitar en la sala de exposiciones del ayuntamiento la muestra Logroño, ciudad cercada, que muestra las fuentes que permiten conocer los acontecimientos del Sitio. Se muestra, además, cómo era la ciudad en el siglo XVI; las importantes consecuencias que tuvo para la ciudad; sus protagonistas; cómo se relató el acontecimiento; y cómo ha evolucionado el conocimiento que ahora tenemos del asedio francés.

Don Felipe firmará en el libro de honor de la ciudad y, poco después, mantendrá un encuentro con una representación de la sociedad civil para concluir la visita.

 

Las viistas. La presencia del jefe del Estado en Logroño coincide con el último día de las Fiestas de la Vendimia, unas celebraciones con las que el entonces príncipe Felipe inauguró sus visitas a La Rioja. Fue en 1996, cuando realizó una gira por varias localidades y enclaves representativos de la región. La última ocasión en la que Felipe VI estuvo en Logroño, junto a la reina Letizia, fue con motivo de la celebración desfile por el Día de las Fuerzas Armadas el 26 de mayo de 2018. Esta era la tercera visita de la pareja real a la comunidad desde la coronación de don Felipe en 2014, después de que en octubre de ese mismo año participaran en la inauguración oficial en España del curso de FP en  Calahorra. A la visita del rey va a suceder la que protagonice doña Letizia a Haro para inaugurar el curso de FP el 30 de septiembre. La capital jarrera fue precisamente el lugar donde los reyes estuvieron por última vez en La Rioja, además de en Santo Domingo, el 10 de julio del pasado año.